Empiezan a aparecer los primeros indicios de malas tardes por casa del líder. El Mallorca recibía al Oviedo para olvidar la derrota ante el Sporting de Gijón. Los asturianos que visten de azul, sin mucha presión en su espalda apareció en Son Moix con la intención de incomodar a los locales.
El partido empezó feo y se desarrolló con auténtica fealdad durante la primera parte. El Mallorca, sin Galarreta volvió a acusar la ausencia de velocidad de circulación de pelota y ahí, el Oviedo creció durante todo el primer acto. Sangalli fue el más activo durante el tramo medio de encuentro, pero sin originar problemas a la zaga balear.
Los bermellones optaron por llevar el peso del encuentro, pero no consiguieron imprimir la velocidad con pelota que les caracteriza y eso facilitó el trabajo a los del Cuco Ziganda en su tarea defensiva.
La segunda parte empezó con un cambio de intenciones en el Mallorca. Luis García cambió sistema a un 4-4-2 con Abdón y Álvaro en punta a cazar balones. El cambio fue significativo y el Mallorca se acercó al gol, pero el efecto se fue diluyendo con el paso de los minutos.
Sin embargo, la segunda parte cogió algo más de color en ambos equipos. El Oviedo probó dos veces a Manolo Reina y las mismas veces tuvo que intervenir Joan Femenías para evitar el gol local.
Tras estos momentos con peligro, se difuminó a partir del 75′ cuando aparece el miedo a perder lo ganado y las piernas pesan más de lo debido para poder acertar en los metros finales.
El Oviedo empezó a ver con buenos ojos el 0-0 y rascar un punto en casa del líder e impuso un muro infranqueable por parte del RCD Mallorca. Dos líneas bien marcadas y bien agazapados para frenar cualquier intentona bermellona, que por mucho que lo intentase, salió derrotado de cualquier envite.
El partido se acabó jugando en territorio ovetense, pero a lo que quería un Oviedo que vivió con cierta comodidad durante los 90 minutos. Reparto de puntos en un encuentro donde el Mallorca sigue acrecentando sus dudas ante los de Ziganda que siguen viviendo tranquilos.