Tenía ante sí la UD Almería la posibilidad de recuperar el liderato de LaLiga SmartBank y no falló. No le fue ni mucho menos sencillo al cuadro indálico lograrlo. Vendió el Sanse de Xabi Alonso cara la piel, pues compitieron muy bien los potrillos. Pero en lo que adolecieron fue de pegada arriba. No tuvo muchas ocasiones, pero las que tuvo fueron claras y no supo aprovecharlas. Eso hace que cuando dejas vivo a un equipo con tanta calidad como el rojiblanco tengas muchos boletos para acabar pagándolo.
El partido no pudo comenzar mejor para el interés almeriense. Antes de que se cumpliesen los cuatro minutos, un casi eterno caracoleo de Sadiq dentro del área intentando hacerse hueco entre la defensa le permitió habilitar a Lazo que llegando desde atrás fusila a Ayesa para poner el 1-0. El gol no varió, al menos sobre el papel, el guión que se le preveía al partido. El Sanse no renunció en ningún momento al balón y a la búsqueda del empate. Adoleció de último pase y sufría en las transiciones donde el Almería, volcándose sobre Sadiq, salía de la presión.
Pero ese esfuerzo de los potrillos tuvieron premio con una dosis importante de fortuna. Un centro de Ander Martín, caído a la izquierda, no acierta la defensa a despejarlo y Lazo, con un mal toque, no despeja, deja el balón suelto en el área y Magunazelaia de primeras y con un buen remate raso ajustado al poste ponía el empate. Y solo dos minutos después una mala salida de Fernando pudo provocar el 1-2 de Ander Martín, pero Juanjo Nieto, muy rápido, logró cortar el esférico y evitar un gol cantado.
Con el paso de los minutos el partido perdió chispa. El Almería se hizo dominador y logró con el paso de los minutos someter a los jóvenes txuri urdin que pedían el descanso a marchas forzadas, logrando aguantar el empuje almeriense y el empate en el marcador.
Tras el descanso el partido tenía las revoluciones a nivel bajo que quería el Sanse. Se jugaba más a lo que quería Xabi Alonso que Rubi y eso le costaba a la UD Almería. No había claras ocasiones en ninguno de los dos bandos hasta que una mala cesión de Carriço atrás provocó un mal despeje de Fernando y Djouahrá, sin portero pero desde unos 40 metros, no acertó a marcar a portería vacía. Un serio aviso que fue respondido pocos minutos después por una buena ocasión que Sadiq, en área pequeña, envió de forma inusual en él por encima del travesaño.
Rubi, aprovechando las molestias físicas de Samú Costa y Babic quemó las naves y agitó su banquillo. Algo que apenas tres minutos después le daría muy buenos réditos. Un robo entre Akieme y Arnau, recién entrado, recuperó en campo contrario, combinaron con Appiah, también recién internado al campo, que vio el desmarque de Sadiq entre centrales para ponerle el balón y que el nigeriano no perdonara en el mano a mano. La profundidad de plantilla indálica le daba ese ansiado gol que les encaramaba de nuevo al liderato en solitario.
Le tocaba ahora a Xabi Alonso mover ficha. El técnico vasco dio entrada a todo el arsenal ofensivo que tenía en el banquillo en busca del empate, mientras que el Almería buscó, ya en un bloque más bajo, robar, correr y sentenciar. Magunazelaia, en un córner, tuvo el empate en su testa, pero remató muy mal. Ahí perdonó y el Almería no lo haría en una gran jugada entre Juan Villar, Sadiq y Pozo, que acabó anotando el 3-1 definitivo para cerrar el marcador y asegurar el liderato indálico.
Ambos miran ya a la duodécima jornada que les llevará a ambos a jugar a domicilio el domingo a las dos de la tarde. El conjunto indálico lo hará en Anduva frente al CD Mirandés, mientras que el filial txuri urdin visitará Lezama para medirse a la SD Amorebieta.