Zamora y Racing de Santander se citan este domingo a las 17 horas en el Ruta de la Plata en uno de los encuentros que cierra la decimotercera jornada del grupo I de la 1ª RFEF. Una jornada que promete ser determinante para el futuro de ambos conjuntos, aunque no para los mismos objetivos. Los zamoranos necesitan la victoria para no alejarse más de la permanencia, mientras que los cántabros buscan afianzar su posición en el playoff y presionar al líder, el Deportivo de la Coruña.
Una final
Para el Zamora cada jornada es una final. Los rojiblancos son penúltimos y solo han sumado ocho puntos en lo que va de campeonato. Cada derrota agranda la herida de un equipo que, pese a dar atisbos de reacción en algunos partidos, no termina de carburar. La derrota del pasado domingo ante el Sanse borró las buenas sensaciones que el equipo tría a Madrid tras el empate ante el Badajoz y la victoria tres jornadas atrás ante el Calahorra. Los zamoranos se adelantaron en el marcador, pero se vieron superados por el cuadro madrileño.
La derrota ante el Sanse hizo temblar el asiento de David Movilla, pero el vasco sigue contando con la confianza de los directivos del cuadro zamorano. El técnico declaró en rueda de prensa que «el domingo el equipo estaba tocado», pero que el lunes los futbolistas estaban «tremendamente conectados, entusiasmados, y con la energía canalizada en el próximo domingo». Los locales esperan entusiasmo también de su afición, y por ello han tirado la casa por la ventana con una promoción que permite a los socios sacar todas las entradas deseadas por el precio de un euro.
A seguir la estela del líder
En agosto, el Racing de Santander aparecía en todas las quinielas para subir a Segunda División. Tres meses después del inicio de la competición, el cuadro cántabro cumple con las expectativas y es segundo con 23 puntos, a solo tres del Dépor, que es líder. Los blanquiverdes solo han perdido tres partidos en lo que va de competición, pero han dejado momentos de duda como el que protagonizaron hace dos semanas con una dura derrota por 3-0 ante la Cultural Leonesa. A pesar de ese desliz, el equipo de Guillermo Fernández Romo es uno de los más sólidos, ya que solo ha encajado nueve goles. Eso, ante un Zamora al que le cuesta mucho hacer gol, puede ser un factor diferencial. En el último choque, los cántabros se impusieron por 2-0 ante el Bilbao Athletic en el Sardinero.
El técnico del Racing declaró en rueda de prensa que «no hay rival fácil» y que para el partido del domingo deben ser «precavidos, incluso aún más que contra el Athletic». El preparador visitante afronta el encuentro con las bajas de Bobadilla, por lesión, y Cedric, por sanción, pero recupera a Carlos Castro.
Ninguno de los dos técnicos ha dado todavía la convocatoria para el encuentro.