Tremendo derbi el que iba a dejar 2021 antes de cambiar de año entre Eibar y Real B. los armeros supieron leer el partido y actuar en el momento oportuno y acabaron oponiéndose a su rival por 3-2 para regalarse una última victoria y cerrar el año como segundos en la clasificación.
Comenzó el partido con mucha intensidad de los locales y poco tardaron en abrir la lata. Sobre el 2’ de encuentro, un centro de Toño desde la banda izquierda fue mandado al área realista, donde estuvo más atento que nadie Gustavo Blanco y, de cabeza, empujó el balón al fondo de las mallas para ponerse 1-0 en el marcador.
No iba a bajar de intensidad el partido, pues quisieron seguir haciendo daño los de Garitano para ampliar distancias y llegar al descanso con el trabajo hecho. Tras un desbarajuste en la defensa visitante, se le escapó el balón a Ayesa hasta dos veces, permitiendo a Stoichkov casi marcar el segundo de no ser porque en el último minuto mandó la defensa el balón a córner, sufriendo en los primeros compases la Real B.
Quiso darle la vuelta a la situación el Sanse con una jugada en largo donde Karrikaburu le ganó la marca a Toño García y se plantó solo ante Yoel, definiendo con acierto, pero el linier señaló fuera de juego por muy poco espacio.
Poco después llegó otra de los txurriudines con Robert Navarro dejando un detalle de calidad para abrir a Gabilondo, este la pusiera en el área y Karrikaburu mandase el balón al palo, pudiendo haber puesto el empate en el choque. Buenos minutos de la Real B que se disiparon en cuanto llegó nuevamente con peligro el Eibar. Un balón el hueco de Gustavo Blanco fue repelido por Jeremy Blasco, pero lo mandó involuntariamente dentro de su portería, poniendo el 2-0.
Lo intentó la Real de nuevo con un disparo de Dani Garrido a las nubes, pero también invalidado por fuera de juego. No estaban teniendo su mejor día los de San Sebastián. Con este resultado se marcharon al descanso en busca de recalibrar estrategias para la segunda parte.
No quisieron empezar demasiado fuerte los armeros, que no tenían prisa ninguna por que pasasen los minutos y. Magunazelaia lo intentó con un balón al hueco que recibió y que definió para anotar el primero para su equipo, aunque con incertidumbre ante la revisión del VAR. Quedaba todavía media hora para darle la vuelta al partido, era posible y los de Xabi Alonso se animaron a hacerlo.
Ahora el dominador del juego fue la Real B, que se mostró cómoda con el esférico y asentándose en el área rival en busca de ver un hueco por el que generar peligro. Los minutos pasaron y las pulsaciones del partido fueron bajando con el paso de los minutos, pues las defensas estuvieron finas para evitar más sustos.
Aldasoro se animó en una arrancada desde el medio campo que acabó con un disparo que acabó lamiendo el poste. Poco a poco las fuerzas empezaron a flaquear, pero los ánimos no. Una gran jugada por la banda derecha llevó a que Alkain hiciese un grandioso pase a Jeremy Blasco para que este rematase y empatase el partido a 10 minutos del final. Lo estaba avisando el Sanse y no acabó perdonando en esta segunda parte.
Cuando parecía que todo estaba ya sentenciado, apareció Edu Expósito para romper los esquemas y volvió loca a la afición. Un disparo raso desde fuera del área a la salida de un córner acabó entrando en la portería de Ayesa, firmando un final de partido memorable y que subió al marcador para dar la victoria a su equipo por 3-2.
Un final de partido digno de un año loco y que dejó al Eibar con los tres puntos y seguido en el marcador y, una vez más, el Sanse no gana un partido en liga, y con este ya son seis las derrotas consecutivas.