No hay quien pare a Rubén Castro. Dos goles más del canario, que no parece cansarse de marcarlos y ya son 15 en lo que va de temporada, empatando con Stuani en lo más alto de la tabla de goleadores. Pero los dos de hoy, junto con el de Boateng con el partido ya sentenciado, le suponen a su equipo colarse en el sexto puesto de la tabla. Un lugar que da opción a la disputa del play-off de ascenso a LaLiga Santander adelantando al Girona.
Salió mejor al partido el Efesé que a los tres minutos ya tuvo la primera clara; un disparo de Sergio Tejera que se fue lamiendo el poste derecho. Los locales salieron mucho más enchufados y apenas dejaban respirar al Fuenlabrada que no lograba salir de su campo. De Blasis tuvo la segunda clara del encuentro con un disparo que se le fue arriba.
Poco a poco los azulones lograron estirarse. Pedro León de libre directo hizo despejar de puños a Marc Martínez, pero quien llevó peligro de verdad, aunque probablemente sin quererlo fue Amigo. El canterano fuenlabreño puso un centro-chut que se envenenó y pegó en el larguero de la portería local. Aunque la mayor posesión era local, el cuadro de Pellicer demostraba que podía hacer cosas peligrosas teniendo poco su control.
El partido cayó en unos minutos sin un dominador claro. Pero todo cambiaría tras una clara falta como innecesaria de Pol Valentín en la frontal del área. De Blasis lanza el libre directo buscando la escuadra, Miguel Morro y con la ayuda del larguero evita el tanto, pero deja el balón muerto en el área pequeña para que Rubén Castro anote su decimocuarto gol del curso a placer.
El gol espoleó a los locales que tuvieron el 2-0 en un centro de Delmás que Iribas despejó in extremis cuando ya se relamían dos jugadores al remate para empujarla. Fue la última ocasión de un primer tiempo que acabó con una fea entrada de Konaté a Sergio Tejera que no tuvo castigo a pesar de la fuerza de la entrada y la revisión de VAR, que consideró no merecía alterar el criterio de Pulido Santana.
Tras el descanso el guión del partido no cambió para los visitantes. El cambio de Kanté -que además acabaría expulsado por una acción imprudente e innecesaria al final del encuentro- no le aportó nada al cuadro de Sergio Pellicer que no era capaz de igualar la intensidad local ni tampoco de generar peligro en las acciones a balón parado, uno de sus fuertes.
Las ocasiones siguieron siendo locales, con Bodiger y especialmente Rubén Castro como protagonistas. El ariete se encontró con una gran intervención de Miguel Morro al minuto 62 para evitar el 2-0. Pero una vez puedes pararle, dos es más complicado. Seis minutos después el delantero albinegro no perdonaría ante el portero madrileño tras recibir un buen pase entre líneas. Dos a cero y partido que quedaba poco menos que visto para sentencia.
Aun así, los madrileños no querían dar por perdido aún el partido. Se volcaron sin éxito buscando un gol ante un Cartagena que se pertrechó y metió cemento en el medio con sus cambios. Además la expulsión de Kanté terminó de descomponer al cuadro fuenlabreño que encajó un tercer gol en un buen testarazo de Boateng y pudo encajar un cuarto que casi logra Okazaki, pero Rubén Pulido lo evitó bajo palos. Alegría albinegra por colarse sextos y preocupación en los azulones que caen un puesto, al vigésimo, y ya ven la salvación a como mínimo cuatro puntos.