Comenzó el encuentro como se podía esperar con un dominio por parte de la Real Sociedad, teniendo la posesión y madurando la jugada sin éxito debido a que el Granada estaba muy bien plantado sobre el terreno de juego. Estaba siendo un partido tranquilo en los primeros compases de encuentro hasta que Luis Milla se inventó un pase medido a la espalda de Le Normand y Arezo en una acción de uno contra uno, no consiguió perforar la meta de Remiro que hizo una gran salida. Tras esa acción el equipo nazarí mejoraba con Milla y Collado entrando más en contacto con el balón. El plan de Robert Moreno era claro, buscar los espacios a las espaldas de la zaga txuri-urdin.
El partido estaba siendo igualado hasta que tras un saque de esquina, un remate de Gorosabel desde la frontal golpeó en Merino y el balón le dio en la mano a Domingos Duarte; Alberolas Rojas pitó penalti y no dudó en ningún momento. Un penalti que Oyarzabal no fallaría y pondría el 1-0 en el marcador.
La Real Sociedad empezaba a imponer su juego
Instantes después del gol, la Real comenzó a encontrar su estilo de juego y empezó a perforar la defensa granadina por banda mediante las internadas de Januzaj y Oyarzabal que estaban siendo los mejores de la primera mitad.
El equipo de Imanol se marchó a los vestuarios con ventaja por la mínima, estaba teniendo más iniciativa jugando en terreno contrario pero las primeras acciones claras fueron por parte del Granada con dos llegadas al espacio de Arezo y Uzuni, posteriormente tras el gol de penalti la Real comenzó a encontrar la profundidad y los espacios a la zaga granadina demostrando que es un equipo superior al actual de Robert Moreno.
Superior el equipo txuri-urdin que seguía dominando
La segunda parte comenzó con el guion esperado, el equipo blaquiazul seguía teniendo la posesión y comenzaba a demostrar el talento ofensivo dominando diferentes situaciones mediante el juego entre líneas, 1vs1, desmarques de ruptura y sobre todo sometiendo por fuera y buscando el centro… La Real Sociedad insistía e insistía con verticalidad haciendo mucho daño por banda y se pudo ver en el segundo gol, un balón recuperado en el centro del campo de Portu que abrió a banda para Oyarzabal que la puso atrás para la llegada de Rafael Alcántara, que esta vez sí puso el 2-0 en el marcador.
Finalmente el Granada intentó tirar de orgullo e intentar inquietar la meta de Álex Remiro pero sin mucho éxito y la Real Sociedad se llevaría los tres puntos, más que necesarios ya que había encadenados tres partidos en los que no había conseguido la victoria y con bastantes dudas en su juego.