Sin brillo y con el corazón a mil tras un final de infarto, pero el conjunto de las Trece Barras se ha colado en el bombo de octavos de final que se sorteará mañana. Sufrió lo indecible mostrando una versión que dista mucho de sus mejores actuaciones en esta temporada. En frente, el Zenit buscó el empate con todas sus fuerzas… y lo encontró, pero el VAR se lo negó.
Porque Chistyakov había mandado a la jaula un centro lateral tras un error de los de Pellegrini en defensa. Sin embargo, desde la sala VOR, se apreció un pisotón de Erokhin sobre su marcador. El colegiado turco señaló falta en ataque y anuló el tanto para hacer enloquecer al Villamarín, que se veía en una prórroga que prometía ser la pesadilla de los cardiólogos.
Pasó el susto para los de Pellegrini. Ahora, tienen tres días para preparar un derbi contra un Sevilla que también ha hecho los deberes en Croacia.
Tras el triunfo 3-2 de la ida en Rusia, el Betis terminó el trabajo y se clasificó a octavos de final de la Europa League, al empatar este jueves con mucho sufrimiento en el partido de vuelta del ‘playoff’ ante el Zenit, resistiendo con un 0-0 en Sevilla.
Tras una primera parte deslucida y sin gran historia, el partido se animó más en la segunda mitad y allí el Betis rozó el tanto por dos ocasiones, pero los intentos del argentino Guido Rodríguez (minuto 49) y de Aitor Ruibal (61) se estrellaron en el palo.
El Zenit también lo intentó y llevó especialmente peligro el brasileño Yuri Alberto (64, 74). En el 90+1, Dmitri Chistyakov firmó un tanto que hubiera forzado la prórroga, pero tras la revisión en el VAR, el árbitro lo anuló.
El Betis es el único equipo español que sigue con vida tanto en Liga (tercer clasificado) como en Copa del Rey (está en semifinales), además de en la competición europea, donde ahora entra entre los dieciséis mejores del segundo torneo continental.