Balón para los locales
Los verdiblancos avisaron en la primera que tuvieron. Pezzella remató de cabeza un centro lateral para poner a prueba a Remiro. Los de Alguacil no se achantaron y poco a poco fueron tomando el control del partido. Isak también lo intentó ante un valiente Claudio Bravo que evitó que el internacional sueco abriera la lata. Tanto estaban llegando los realistas hasta que al cuarto de hora de partido consiguieron el premio del gol. Zubimendi se encontraba en el lugar ideal para conseguir mandar a guardar el balón pero Díaz de Mera levantó la mano para señalar posición antirreglamentaria del jugador local, anulando así el tanto.
Los minutos pasaban y los txuri-urdin se sentían mucho más cómodos con la posesión del balón, enfrentándose a un Betis que buscaba las transiciones rápidas para intentar sorprender a los donostiarras. Los andaluces consiguieron espabilar y gracias a la magia de Fekir, que puso un fantástico balón a Carvalho casi consiguieron su objetivo pero el portugués mandó el balón por encima de la portería de Remiro en la más clara para ellos. En el último tramo de la primera mitad Isak lo quiso intentar en un par de ocasiones, pero el objetivo del Betis estaba siendo truncar las ocasiones locales.
El encuentro se tensó al final
Al igual que en la primera mitad, los de Pellegrini salieron más activos al césped de Anoeta, pero rápidamente los donostiarras volvieron a marcar la pauta de juego. Sorloth aprovechó un buen centro de Silva para intentar clavarla con la cabeza pero la pelota se marchó muy cerca de la madera. Un ex txuri-urdin, Canales, probó suerte desde el balcón del área para teledirigir la pelota hasta la escuadra de Remiro. La bola se marchó muy cerca de la cruceta, metiendo el susto en el cuerpo de la parroquia que se agolpaba en las gradas del Reale Arena.
Los minutos finales se aproximaban y los equipos hacían cambios, realizando Pellegrini cambios con la vista puesta en la próxima final de Copa del Rey de la semana que viene: titulares indiscutibles como Carvalho (en el descanso), Juanmi o Borja Iglesias tuvieron reemplazo antes del tramo final del encuentro. Ya en el ’80 Sorloth volvió a tener una buena ocasión, con un fuerte disparo que tocó en un defensor verdiblanco (hoy de verde y dorado) para mandar la pelota a saque de esquina. La Real lo intentaba más, pero la tensión final del encuentro pudo a los futbolistas y el colegiado del encuentro mostró hasta cuatro tarjetas en el descuento, una de ellas roja para David Silva. Finalmente reparto de puntos, siendo el más beneficiado el Atlético de Madrid, que ve como sus dos competidores directos por la Champions League se dejan puntos por el camino.