Queda claro que este verano para Espanyol y Mallorca la portería es una de las líneas en la que más prioridad hay para reforzarse. Tras las salidas de Diego López y Oier en los catalanes, y de Reina y Sergio Rico en los baleares, ambos equipos necesitan, como mínimo, un guardameta, aunque no sería nada a descartar que pudiesen llegar a pares. Y uno de los nombres que están en la mesa de ambos conjuntos, bien por seguimiento o por ofrecimiento, es el del portero del Huesca, Álvaro Fernández (Arnedo, La Rioja, 13 de abril de 1998).
El portero tiene contrato con la SD Huesca hasta 2024 tras su fichaje en el verano de 2019. El portero vuelve a la disciplina oscense tras su cesión en el Brentford de la Premier League, donde jugó 12 partidos, pero estuvo mayormente a la sombra del internacional español David Raya. Lo que el club altoaragonés prefiere es lograr acordar un traspaso que deje un dinero en caja.
Una nueva cesión sería la alternativa si no hubiese otra posibilidad y es probablemente al escenario que tanto Espanyol como Mallorca estarán más atentos. Porque ambos son conscientes de que se asume que Álvaro Fernández no va a aceptar jugar en Segunda División este curso y que el tiempo juega a su favor. No obstante, el mercado aún es largo y pueden pasar muchas cosas.