Goles y control santanderino
Los locales salieron con todo al césped del Sardinero. Ya en el minuto 4 Matheus avisó a los asturianos pero se encontró con el Pichu Cuéllar. Los rojiblancos rápidamente respondieron y salieron a buscar algo por los dominios de Parera aunque Jordi Mboula sería el que abriese la lata, que se fabricó la jugada y aprovechó el rechace del guardameta visitante para enviar el balón a guardar. El gol le aportó a los de José Alberto mucha tranquilidad, aunque los gijonenses intentasen equilibrar de nuevo el electrónico. El segundo no se hizo esperar y doce minutos más tarde llegó. Dani Fernández buscó a Matheus Aiás y con un fuerte disparo aumentó la distancia en el marcador. Abelardo vio muy cuesta arriba el choque y decidió agitar el once inicial a la media hora de juego, entrando Rivera y Cristo por Bruno y Pedro Díaz. Los cambios hicieron algo de efecto, pero fue fugaz, siendo el Racing el que casi finiquita el partido antes del descanso, esta vez por medio de Germán, que se topó con el travesaño. Con el resultado de dos tantos a cero se marcharon los veintidós protagonistas a vestuarios.
El marcador no se movió
Abelardo seguía sin verlo claro e introdujo en el descanso dos nuevas sustituciones. Los visitantes tenían claro que el empate pasaba por subir un par de marchas y arriesgar más de lo normal. Y casi les salió, cuando Jony, que había entrado de refresco en el entretiempo, envió la bola con un testarazo al poste. Sin embargo, el partido entró en una fase más trabada, con más interrupciones por amonestaciones y sustituciones, siendo el Racing un buen gestor del tiempo para relajar los ánimos y llevar el partido donde querían. Finalmente, los tres puntos se quedaron en Santander, siendo fundamentales para arrancar el 2023 de manera progresiva, saliendo así de los puestos del descenso. El Sporting, por su parte, sigue sin levantar cabeza, sumando 5 puntos de los últimos 15 disponibles y mirando con un ojo al descenso, estando a tan solo tres puntos sobre él.