El Girona está completando una temporada magnífica a las órdenes de Míchel que se está ganando el estar una temporada más en Primera División y tras la victoria de hoy ante el Elche se pone con 38 puntos prácticamente salvado. Por el otro lado el conjunto ilicitano tuvo sus oportunidades para abrir el marcador pero no las aprovecharon.
Gazzaniga sería determinante en los primeros minutos de encuentro
El Elche comenzó el partido valiente y más enchufado que el equipo local. Los ilicitanos dominaban mediante la posesión y tuvieron ocasiones para adelantarse en el marcador pero entre la mala dinámica y que Gazzaniga está cuajando una gran temporada ninguna acción de peligro pudo batir la meta del guardameta argentino.
En el tramo final de la primera parte el Girona iba encontrando más su juego y el equipo de Beccacece cada vez iba reculando más sus líneas, tanto era así que tras un centro lateral de Toni Villa, el Taty Castellanos adelantaría de cabeza al conjunto de Montilivi. Un Taty Castellanos que esta semana había cerrado sus redes sociales y pasó una mala semana tras haber fallado varias ocasiones claras en el Camp Nou.
Beccacece agitaba la coctelera
El entrenador argentino del Elche realizó varios cambios tras los primeros 45 minutos metiendo en el campo a Pol Lirola y Collado y de hecho le funcionaron ya que los blanquiverdes volvían a tomar las riendas al encuentro pero sin apenas contundencia ofensiva. A partir del minuto 57 de juego, Míchel realizó cambios pidiendo al equipo que apretara el acelerador. De nuevo, el Girona volvió a coger el control del partido y tras un mal despeje de la zaga visitante, Oriol Romeu se sacó un gran tiro cruzado desde la frontal del área imposible para Werner.
Finalmente el árbitro expulsó a Ezequiel Ponce tras haber intervenido el VAR debido a un pisotón involuntario por lo que el castigo fue excesivo.