El último partido de plata en el Anxo Carro. El último duelo de Segunda División que los seguidores del Lugo podrán ver, como mínimo, en un año. Y era para recibir a un Huesca para el que el feudo gallego siempre será especial pero muy lejos este curso del ascenso logrado en Lugo.
Dominaba el partido el Huesca en los primeros compases teniendo el balón y llegando profundo por los costados, aunque sin ocasiones claras ante Sequeira. Buena carta de presentación de los oscenses, con más energía e intención que los locales. Sin demasiados acercamientos más allá de una balón largo a Sebas que despejó el portero del Huesca. Poco ritmo en el encuentro del Anxo Carro.
Juego poco claro entre los dos equipos. Las imprecisiones ganaban terreno a los ataques en un partido nulo. En el 33, gran ocasión del Lugo. Jugada por la izquierda de Sebas Moyano, que metió un pase atrás y Juanpe remató de cabeza para forzar la gran parada de Andrés Fernández. El Lugo se defendía sin apuros ante las intentonas aragonesas, que no acababan de inquietar a Sequeira.
Partido pocho y con poca electricidad en el Anxo Carro. El partido se encamina hacia el descanso con poco que llevarse a la boca. 0-0.
Un 0-0 que duraría poco en el luminoso al hacer el Huesca el primero en el segundo acto y poco después el segundo. Marcó dos goles en poco más de un minuto el Huesca. Primero con un disparo de Javi Martínez desde fuera del área y luego con un balón que robó Obeng y llevó al fondo de las redes. Recortan diferencias los lucenses en el 73′ con un cabezazo al saque de una falta, rematada de cabeza por Idrissa.
En el tramo final de partido, el Lugo lo seguía intentando y merece más. El Huesca, pidiendo la hora. No se movería más el marcador y el Huesca se llevaba los tres puntos de un Anxo Carro que despedía la categoría de plata con derrota.