Primer derbi astur de la temporada que acogerá El Requexón esta campaña. Si bien el filial azul ya ha jugado esta campaña frente al Unión Popular de Langreo, lo hizo como visitante. Ahora lo hace como local ante un Real Avilés con el que comparte un problema que le está llevando a estar en una situación clasificatoria poco deseada: la falta de gol. En el caso del equipo de Emilio Cañedo, que vuelve a la que fue su casa hasta 2021, le está haciendo alejarse mucho de la zona noble de la clasificación, objetivo ineludible del equipo realavilesino. Incluso esa falta de gol le apeó de la Copa del Rey el pasado miércoles frente a un Arenteiro que tuvo una ocasión y la aprovechó.
Con esa amarga resaca copera llegará el cuadro del Suárez Puerta a la casa del filial oviedista. Un encuentro que, nunca se sabe, pero si son amantes de las apuestas, es para probar con unos euros a un partido bajo en goles. Éste, lo dirigirá la colegiada bilbaína, adscrita al comité vasco, Olatz Rivera Olmedo. De 27 años de edad, la vizcaína compagina el arbitraje en la Liga F con la Segunda Federación masculina. El partido en la ciudad deportiva azul será su debut este curso en la cuarta categoría masculina, ya que hasta ahora no ha dirigido encuentro alguno.
En el cuadro realavilesino se esperan cambios respecto a la Copa. Emilio Cañedo ya sabía desde el pasado fin de semana que tendría una semana más ajetreada de lo normal con tres partidos en menos de siete días. Ese es el motivo por el que ha repartido esfuerzos y respecto al once que cayó apeado del torneo copero, se esperan bastantes cambios. Aun así, el objetivo será el mismo: ganar e intentar recortar ese hándicap y desventaja con la zona alta. Jugadores como Davo Fernández, Álvaro Fernández o Claudio Medina aspiran a recuperar un puesto en el once para lograr ese balsámico triunfo. Además lo intentarán buscar con el apoyo de unos 150 aficionados que se esperan acudan al Requexón.
Pero en la casa oviedista también la necesitan. El conjunto que dirige Jaime Álvarez viene tras encajar dos derrotas contundentes en sendos desplazamientos a campos, todo hay que decirlo, de mucha dificultad como Pasarón y el Ruta de la Plata. Dos grandes equipos frente a los que se puede perder, pero que ahora en el retorno a casa obligan al filial azul a casi no poder fallar para salir del descenso. El técnico podrá contar con el grueso de su plantilla, salvo, si no hay sorpresa, Mario Sesé. El valenciano está en dinámica de primer equipo y disputó el partido de Copa del Rey con el primer equipo. Todo apunta a que seguirá a las órdenes de Carrión para visitar Zaragoza el próximo lunes.