Superado ya el ecuador del mes de noviembre, los jugadores y plantillas inician la cuenta atrás hasta el parón navideño. Uno que este curso coincidirá además con el final de la primera vuelta. Y en esta jornada en Miramar se vivirá un duelo de esos que allá por primavera podrían tener una trascendencia considerable. Y es que el Marino, con catorce puntos y marcando la zona de salvación actualmente, recibe a un Guijuelo inmerso en una crisis como no se le conocía hacía años y que navega hundido en puestos de descenso con solo siete puntos. Algo más que tres puntos en juego a las cinco de la tarde, horario futbolístico por excelencia, en la villa de Luanco.
El cuadro marinista llega a este duelo tras caer la semana pasada en Santander frente al Rayo Cantabria. El resultado, 4-2, fue engañoso para los méritos luanquinos, que combatieron fieramente, pero sucumbieron a la calidad del filial cántabro que golpeó con dureza en prácticamente todas sus ocasiones. Esa contundencia en las áreas está castigando a un Marino que quiere romper su actual racha de cuatro partidos sin ganar. Más, con un total de seis sin vencer, llega el Guijuelo situado a siete puntos de esa permanencia que marcan los asturianos. Necesitan ganar los salmantinos a los que, al menos por ahora y en lo que a resultados se refiere, no les ha servido como revulsivo un relevo en el banquillo. La semana pasada no pasaron del empate sin goles frente al Langreo.
Manel, que no estará en el banquillo tras haber sido expulsado la semana pasada y ser castigado con dos encuentros, no podrá contar con Dalios Tejera, Nacho Matador y César García por lesión. No obstante y a pesar de venir de una derrota la pasada jornada, no se esperan grandes cambios en el once del cuadro luanquín. Sí se esperan esos por parte de Rubén Gala. Uno de los jugadores importantes de su plantel como es Carmona regresará al equipo tras no poder estar disponible por sanción la semana pasada. Todo para buscar la primera derrota con el técnico de Venta de Baños en el banquillo chacinero que, si bien no les sacará de descenso, les acercaría a esos puestos de permanencia.
El encuentro será dirigido por el colegiado vasco Jon Andrade de Olmo. De 29 años y natural de Balmaseda, en Bizkaia, cumple su segunda temporada en la cuarta categoría del fútbol español. Este encuentro supondrá su ‘mayoría de edad’, pues será el número dieciocho. En los anteriores, dirigió en una ocasión al Marino, también en Miramar y con victoria gozoniega por 2-0 frente al Racing Villalbés. Para el cuadro salmantino será la primera vez que tengan al colegiado vasco al frente de los mandos de un encuentro.