El Real Madrid de las grandes noches reapareció este martes en Champions League. El Rey de Europa volvió a hacer de las suyas en un final de infarto en el Etihad Stadium. El conjunto blanco llegó con un marcador adverso, 2-1, al minuto 86, pero los goles de Brahim y Bellingham dieron la vuelta al marcador. La competición europea es fetiche para los merengues que remontaron en dos ocasiones un marcador adverso. El primero en abrir la lata de los goles fue Haaland que adelantó a los locales en la primera mitad. Ya en el segundo acto Kylian Mbappé puso igualó el marcador a la hora de partido. Se volvieron a adelantar los de Guardiola por medio de Haaland, esta vez desde los once metros en el 80’, pero Brahim, seis minutos después, y Bellingham, en el añadido, firmaron el triunfo de los de Ancelotti.
El pase a octavos se definirá el próximo miércoles, 19 de febrero, en el Santiago Bernabéu a las 21 horas. No solo se juega algo deportivo el Real Madrid, también una operación económicamente muy beneficiosa. Eliminar al Manchester City le garantizaría al club blanco unos ingresos extra de 11 millones de euros. Es es la cifra que paga la UEFA a los equipos que llegan hasta los octavos de final. De no clasificarse, se estima que puede dejar de ganar en torno a 23 millones de euros: 11 por acceder a octavos de final y otros 12,5 en una hipotética clasificación a cuartos.
Un dinero muy necesario de cara al mercado de verano para el conjunto blanco que deberá acometer varios fichajes. Una cuantía económica que vendría a sumarse a los ya ingresado en Champions. Perfiles especializados como Swiss Ramble y Football Meets Data fijan que la cantidad ingresada por el Real Madrid tras la primera fase sería de entre 78 y 81 millones de euros, incluido el dinero que la UEFA entrega según los contratos de TV nacionales y el coeficiente de los últimos diez años.
Estamos hablando, si se suman todas las cantidades de que seguir en la competición europea podría traer al equipo de Florentino más de 100 millones de euros, cifra similar a la ingresada en otras temporadas. Cifras desorbitantes, pero a la vez normales este mundo del fútbol. Más allá de lo económico, los aficionados esperan otra noche mágica de los blancos en su competición fetiche para seguir en el camino a una nueva final por el título.