Eudardo Camavinga está viviendo uno de los peores momentos desde que es jugador del Real Madrid. Las excusas de su juventud e inexperiencia ya no le valen de coartada y tanto cuerpo técnico, directiva y la propia afición empiezan a cuestionar su valía para el Real Madrid, y su futuro en la casa blanca empieza a estar en entredicho.
Camavinga y su mal estado de forma
Esta temporada no está siendo sencilla para el mediocentro francés. Su bajo rendimiento y sus malas decisiones le están restando el protagonismo y la importancia que parecía estar adquiriendo. Su entrega en el terreno de juego es indiscutible, a veces, incluso en exceso, se le achaca que no sabe medir y compromete la situación del equipo con acciones que ya debería haber aprendido a gestionar.
Contra el Atlético de Madrid tuvo una nueva oportunidad debido a las bajas del equipo en el centro del campo, y no supo aprovecharla. Muchos consideraban que Luka Modric tendría que haber jugado de inicio, y quedó demostrado que no les faltaba razón. Ancelotti dio entrada al croata a los 60 minutos por Camavinga, un cambio temprano para lo que nos tiene acostumbrado el técnico italiano, y el resultado deja en muy mal lugar al francés. Modric se echó el equipo a las espaldas, se hizo dueño del centro del campo, y cambió la dinámica de un partido que estaba muy igualado.
Camavinga, señalado ante el Atlético de Madrid
En la noche de ayer, Camavinga cometió varios errores graves, pero el que más llama la atención fue cómo defendió a Julián Álvarez en el gol del Atlético de Madrid. Su ímpetu y la falta de contundencia en la banda, dejó al argentino en posición franca para anotar el empate a uno, un galazo, sí, pero la jugada pedía contención por parte del mediocentro.
A parte del gol, se le vio impreciso, descolocado, comprometiendo al equipo con varias pérdidas de balón impropias de un centrocampista de la talla de Camavinga.
Los errores de Camavinga
Camavinga se ha visto envuelto en varias lesiones que han mermado su rendimiento, que no le han permitido recuperar su mejor versión. Desde que ha vuelto a los terrenos de juego, su nivel no es muy bajo. Además, varios errores clave durante la temporada señalan al futbolista, como fue el penalti que cometió ante Gavi en la final de la Supercopa de España, en una jugada donde no había nada, ni peligro ni ocasión de gol, pero su falta de atención acabó en un penalti tonto y en el inicio de la remontado blaugrana que acabó en una sonrojante derrota para los blancos.
Durante la eliminatoria de Copa ante el Celta, regaló un gol al equipo vigués que llevó el partido a la prórroga después de que el Real Madrid disfrutara de una ventaja de dos goles. Ante Osasuna, cometió otro penalti por no saber medir en un jugada donde el delantero local ya había rematado un balón que se iba fuera. Un penalti de los que se pitan ahora, dudoso, pero la intensidad de aquel pisotón fue tal, que al colegiado no le quedó otra que señalar la pena máxima. El Real Madrid cedió dos puntos en ese partido.
Por último, en Champions League, cometió una mano muy clara que podía haber evitado dentro del área ante el Lille, un partido que acabó con derrota, una de las razones por las que el club blanco no acabó entre los 8 primeros de la fase de liga.
Camavinga se juega su futuro
Estos errores, sumados a su bajo rendimiento, empiezan a poner en cuestión su capacidad para ser el jugador de futuro que espera el Real Madrid. Camavinga sigue siendo muy joven, pero ya lleva cuatro temporadas en el Real Madrid, su progresión parece haberse frenado de golpe, y lo que al principio era paciencia y halagos, se está volviendo en su contra.
El Real Madrid es un equipo que no suele esperar, y la temporada del francés podría acabar con el futbolista fuera del equipo.