El partido de Vinicius Jr. ante el Barcelona fue el reflejo de lo que ha sido este futbolista durante toda la temporada. Mal en ataque y, sobre todo mal en el compromiso con el equipo y en las ayudas en defensa. El del Barcelona fue, sin duda, uno de sus peores partidos con la camiseta del Real Madrid, un último tachón a su hoja de servicio de esta temporada, un tachón que vuelve a convertirle en el blanco de todas las críticas.
Una temporada para el olvido
Vinicius ha tenido una muy mala temporada en el Real Madrid, lejos del nivel de la pasada temporada que le permitieron pelear por el Balón de Oro, lejos de ser la sombra del futbolista que ha sido hasta este año.
El inicio de la campaña ya estuvo por debajo de la esperado, pero mucho mejor del nivel actual. La lucha por el Balón de Oro le hizo estar muy metido en la dinámica del equipo. No estaba al mismo nivel que la pasada campaña, pero se veía incluso normal después del parón del verano. Sin embargo, desde que quedó segundo en la gala por el galardón al mejor jugador del mundo todo se desmoronó.
La respuesta del mundo del fútbol a su segundo puesto generó una oleada de críticas al galardón, y esto hizo crecer el ego del futbolista. El siguiente episodio al Balón de Oro fue una lesión que le apartó un mes de los terrenos de juego, y desde entonces no ha sido capaz de recuperarse.
Después llegó a oferta de Arabia Saudí, en el que ofrecían al futbolista 1.000 millones por cinco temporadas. Aunque el futbolista parece que no está dispuesto a frenar su ambición en la élite del fútbol por tal cantidad de dinero, ha usado esa oferta para pedir una ampliación de contrato en el Real Madrid y poner patas arriba el vestuario blanco.
Comportamiento y declaraciones
Vinicius ha protagonizado demasiados enfrentamientos con rivales y aficiones, lo que ha generado que muchos se hayan posicionado en su contra. Además, en Brasil pidió que no le dieran el Mundial de 2030 a España por racismo, siendo la final, con toda probabilidad, en el Santiago Bernabéu. Estos episodios generó la ira, incluso de sus propios aficionados, que comenzaron incluso a pitarle en el Santiago Bernabéu.
Partido contra el Barcelona
El partido del Barcelona es un reflejo de lo que ha sido Vinicius desde el mes de marzo. Un jugador que lo intenta en ataque, pero no le salen las cosas, pero sin nada de compromiso con el trabajo con sus compañeros. No parecía que al futbolista brasileño le importara lo que se estaba jugando el equipo. No ayudaba, no corría para atrás, permitía que el Barcelona sacara el balón fácil -algo que ya hace con presión, si además se la quitas…-, y solo aguardaba cazar un balón a la contra. Dio dos asistencias, que no es poca cosa, pero para no darlas, no tuvieron mayor dificultad. Sin embargo, quedó señalado, especialmente por su actitud.
Mucho tiene que cambiar la mentalidad de Vinicius de cara a la próxima temporada. Mucho tiene que hacerle cambiar el nuevo entrenador que llegue. Un equipo como el Real Madrid, que debe luchar por todos los títulos, no puede permitirse que uno de sus futbolistas no trabaje. El fútbol moderno lo demanda, el fútbol de ahora lo hace necesario, y un equipo como el Real Madrid necesita tener el compromiso de todos los jugadores. El Santiago Bernabéu ha visto a grandes futbolistas a lo largo de la historia, y las grandes ovaciones, se las dedica a los futbolistas que trabajan y que lo dan todo en el campo.