Cuatro fichajes suma ya el Real Madrid de cara a la próxima temporada, pero para muchos, aún deben llegar más. Los refuerzos se centran en una línea defensiva mejorada notablemente en sus laterales, con las llegadas de Trent Alexander-Arnold y la más reciente de Álvaro Carreras, y también en el puesto de central, con un Dean Huijsen que se ha erigido en la revelación madridista en el Mundial de Clubes, con permiso del canterano Gonzalo. Sin embargo, en el plan del Madrid trazado por Florentino Pérez y que ya conoce Xabi Alonso, hay una pieza que no termina de cuadrar y que tendría que ver con el protagonismo de Arda Guler en la alineación.
El centro del campo, teniendo en cuenta que Franco Mastantuono llega como atacante o media punta, aún no ha recibido ningún nuevo integrante de cara a la temporada 2025-26 y eso son palabras mayores teniendo en cuenta que el Real Madrid si de algo adoleció en los últimos doce meses fue de un timonel en el papel que había ejercido con maestría Toni Kroos en años anteriores. Llegó Kylian Mbappé, pero nadie reemplazó a Kroos y esto podría volver a suceder tras la contratación de Xabi Alonso.
El Real Madrid cuenta con grandes jugadores para ocupar puestos en su mediocampo, desde jugadores contrastados como Fede Valverde, hasta estrellas como Jude Bellingham pasando por físicos diferenciales de la talla de Tchouaméni o Camavinga. Sin embargo, y más tras la salida de Luka Modric, falta un gestor, con Dani Ceballos y un reconvertido Guler como posibles ocupantes de este rol capital para cualquier equipo grande.
Sin fichajes en el medio
La planificación del Real Madrid podría no incluir la llegada de un centrocampista este verano, tal y como han informado diversos medios de comunicación con información privilegiada del club. Los mismos inciden en la valoración de la cúpula madridista, donde piensan que el potencial de Arda Guler es suficiente para complementar a unos Valverde, Bellingham o Tchouaméni que deben dar un paso adelante en lo que a su relación con la gestión del juego se refiere.
También entra en esta ecuación Eduardo Camavinga, del que se espera un paso adelante tras varias temporadas como promesa y sin asentarse como realidad. Ceballos, el quinto en discordia, también puede tener minutos, en un rol secundario sin olvidar que fue un hombre clave en el tramo de la pasada temporada en el que el Real Madrid mejor jugó.
Guler, promesa o realidad
El rol de Arda Guler fue uno de los que más frustró al madridismo en la etapa de Carlo Ancelotti como entrenador. Talentoso como pocos, el internacional turco no tuvo los minutos necesarios para consolidarse y, a decir verdad, sólo en el último tramo de la temporada cumplió con las expectativas que hay puestas sobre él a nivel de rendimiento. Con la llegada de Xabi, desde el club se ha apostado por retrasar su posición, con buenos resultados en el Mundial de Clubes pero la duda del día del PSG, en un escenario de verdad exigente en el que pasó totalmente desapercibido.
Con apenas 20 años y habiendo jugado como mediapunta o extremo, pasar a centrar la gestión del juego en Guler puede convertirse en un error para el Real Madrid, o al menos una apuesta muy arriesgada que sólo podría darse vuelta en caso de que Florentino se anime a hacer una gran inversión en el centro del campo. Los Vitinha, Rodri o Enzo parecen intocables, mientras que otros jugadores algo más factibles de romper el blindaje, caso de Barella o Mac Allister, se acercarían a los 90 millones de euros de traspaso. El Madrid tiene la decisión final.