En Monza habrá que vigilar a Aston Martin desde la parte baja de la tabla. Porque tras el buen sabor de boca que dejaron Hungría, con el quinto puesto de Alonso, y Zandvoort, donde al menos lograron salvar puntos, las expectativas vuelven a hundirse para el AMR25.
Monza pone a prueba a Aston Martin
Si bien por la mañana acabó dentro del ‘top 10’, el español concluyó 15º en los segundos entrenos, probablemente su posición más real desde donde deberá luchar todo el fin de semana.
El equipo británico se enfrenta a un trazado que expone todas sus debilidades, en especial la falta de eficiencia aerodinámica en recta. El recuerdo inmediato es inevitable: Spa-Francorchamps. Allí, el Aston Martin se mostró incapaz de competir y sufrió un auténtico calvario (19º y 20º en clasificación).
En Monza, sin apenas zonas técnicas que puedan servir de refugio, las previsiones son igual de pesimistas. Mike Krack, director del equipo, lo reconocía con cautela al llegar al Gran Premio el pasado jueves. Siempre pueden existir condiciones cambiantes que nos hagan mejorar, pero sabemos que aquí sufriremos más que en otros circuitos».
Alonso pide encontrar más velocidad
Y al término de este viernes, con los entrenamientos del viernes ya concluidos, se ha podido ver que en Aston Martin se evidencia lo que ha dicho constantemente Fernando Alonso: en los Libres 1 ya van al máximo de su rendimiento, y eso les pasa factura una vez que el resto empieza a progresar. Como pasó en Zandvoort, como pasó en Silverstone…
El asturiano, por la tarde, encontró rebufos con los medios, pero el blando no terminó de funcionar. El buen nivel de los primeros libres se tornó en un golpe de realidad. «Es lo que esperábamos», explicaba Pedro de la Rosa en la emisión de DAZN.
Y así lo dejó hacer Fernando Alonso a los medios presentes en Monza, entre ellos GRADA3. «Hemos ido probando diferentes sistemas en el coche. Estaba bien, el agarre es bastante alto aquí con este asfalto y estas temperaturas. En general, ha sido un viernes normal, aún necesitamos mejorar el coche, no somos tan competitivos como en los últimos dos eventos y necesitamos encontrar más velocidad», ha comentado Alonso.
«En las curvas lentas podemos hacer algo»
Significa, claro, que la batalla en la zona media será encarnizada desde el primer corte de la Q1. Y viendo a Hulkenberg con el Sauber siendo octavo este viernes, se puede entender que habrá muchos clientes por uno o dos puestos en Q3. Es cierto, sí, que el actual Aston Martin ha mejorado desde Bélgica, su peor fin de semana del año desde las evoluciones de Imola.
«Ha sido peor en las curvas rápidas, en las lentas podemos hacer algo. Con mucha gasolina me he sentido poco competitivo, así que necesitamos encontrar más velocidad», añadía el astur. En Silverstone han encontrado soluciones con el suelo, pero está en su ventana óptima en circuitos de eficiencia aerodinámica. Alonso deberá poner el resto.
“Al principio no teníamos un coche para estar entre los diez mejores los domingos, y ahora parece que podemos luchar en esa clase media y puntuar regularmente. En las últimas nueve carreras creo que he estado siete veces en el Q3, lo que demuestra que es un coche aerodinámicamente muy distinto, aunque no ha cambiado tanto mecánicamente”, explicaba el jueves sobre la evolución de Aston Martin. «La configuración es algo en lo que trabajamos de un fin de semana a otro, pero aerodinámicamente el coche es más estable, más fácil de pilotar y nos salen mejor las vueltas”.
Aunque Monza no se parece a ese par de “sitios buenos (hasta final de año), similares a Budapest o Zandvoort, quizás Singapur o Brasil, pero es cierto que nos hemos encontrado sorpresas positivas y a veces negativas, así que no estamos depositando esperanzas en cada carrera. Queremos maximizar todos los fines de semana, como aquí en Monza, y ya veremos dónde estamos en Abu Dabi y con cuántos puntos”. Por si acaso, mejor ponerse en… lo peor.