Un sector en morado de Fernando Alonso tiene una fuerza tremenda. Puede movilizar a un país entero, como ya ha ocurrido en varias ocasiones. Las sensaciones en los entrenamientos libres uno fueron inmejorables, con el español siendo el más rápido de la parrilla. No terminaba líder en una sesión, por cierto, desde el año pasado en Canadá. Los Libres 1 desataron la locura porque parece que el Aston Martin corre este fin de semana. Esos buenos presagios se mantuvieron en la segunda sesión, con unos tiempos más realistas y con McLaren, por ejemplo, mostrando un potencial mayor. Aún así, imposible calmarse viendo los tiempos del bicampeón.
Alonso, no obstante, siguió a lo suyo con la esperanza de lograr un resultado solvente de Singapur. Se colocó segundo mientras era el único piloto junto a Lance Stroll que portaba neumático duro. El resto de la parrilla iba con el medio. Cuando restaba media hora de sesión, empezó el festival de los neumáticos blandos para realizar simulacros de clasificación. El español pintó de morado, en su primer intento, los primeros dos sectores de su primera vuelta lanzada con la goma roja montada. No pudo completar su giro aunque venía volando con su AMR25 para ponerse primero, calcando los sectores de Lando Norris. Seguía subiendo el suflé.
Liam Lawson le arruinó la vuelta con el tremendo accidente que sufrió con su Racing Bulls. El neocelandés se acercó demasiado a los muros y desllantó su neumático trasero derecho. Fue la segunda bandera roja de la sesión y detuvo los Libres 2 durante un buen rato, obligando a varios pilotos como Alonso y Norris a abortar su vuelta. El último intento, cuando restaban ocho minutos, terminó de convencer a aquellos incrédulos que no se creían el ritmo de Aston Martin en las calles de Marina Bay.
Stroll confirma los pronósticos
El asturiano firmó un impresionante 1:30:877 para liderar la tabla de nuevo. Una vuelta fulgurante con neumático blando usado, el mismo que había montado en la vuelta que tuvo que abortar tras el accidente de Lawson. Como para pedir calma. Verstappen le superó, con rueda nueva y más joven, por solo veinte milésimas. El neerlandés nunca falla y siempre está ahí. El verdadero termómetro de Aston Martin es Stroll, que se colocó tercero detrás de Verstappen y Alonso. A medio segundo, eso sí, del bicampeón del mundo, que terminó en cuarta posición y a +0,163 del líder Oscar Piastri.
La velocidad del canadiense en Libres es otro motivo para creer en un resultado positivo del equipo de Silverstone. Si se esperaba verles peleando por un quinto o sexto puesto, a lo mejor habría que recalcular los pronósticos. Se desconoce, eso sí, la carga de combustible, las alturas y el mapa motor que llevaban los coches verdes en las sesiones de Libres. Ver a un Mercedes estrellado y sin alerón delantero invita a pensar que Kimi Antonelli ha cometido un error, a juzgar por su temporada llena de dudas. Error.
Fue el solvente George Russell, cuando restaban 42 minutos de sesión, el que provocó bandera roja cuando se estrelló contra el muro en la curva 16. El británico perdió el monoplaza de atrás y destrozó su Mercedes, perdiendo el alerón delantero y dañando las protecciones. Lo de Russell terminó en desastre pero hubo decenas de sustos que no fueron a más en forma de roces con el muro, trompos, bloqueadas y salidas de pista. Es lo que tiene un urbano como Singapur, que exige muchísimo.