Partido loco del que disfrutaron los que se acercaron a las instalaciones deportivas de Sarriena. Los visitantes supieron remontar el gol inicial de los azulgranas y ponerse por encima en el marcador hasta en dos ocasiones, pero los chicos de Jon Ander Lambea nunca se rindieron y rescataron «in extremis» un punto de mucho mérito en un encuentro que se recordará por varios golazos, por ambos bandos.
La locura se instauró en Sarriena desde el comienzo del partido, ya que los locales solo necesitaron 5 minutos para abrir la lata. Luca Ferrone remató con la cabeza de manera inapelable un excelente saque de falta de Goti desde un lateral, que desató el delirio en la grada de los «Leioa Zaleak».
El conjunto visitante, lejos de venirse abajo con el gol, salió rápidamente a buscar el empate, y lo encontró apenas diez minutos después, en una de las jugadas de la jornada, cuando Rayco se deshizo de hasta tres jugadores del Leioa y batió a Iturrioz para poner la igualada. Este tanto parece que dio alas a los de Sergio Rodríguez, que, tras aprovechar un despiste defensivo de los locales, pusieron el 1-2 en el minuto 25, de mano de Marcos André.
El encuentro estaba siendo muy disputado y a pesar de no contar con excesivas ocasiones, ya se habían visto tres goles. La grada apretó a los suyos y Yurrebaso puso, antes del descanso, la igualada de nuevo en el marcador, tras zafarse de su defensor con un sombrero y batir por bajo a Miguel.
La segunda parte comenzó igual que terminó la primera: con los locales buscando otro gol. Los leioaztarras se vinieron arriba tras el tanto del empate de Yurrebaso y buscaron con ahínco el gol que les pusiera por delante, pero las cosas no les salieron como quisieron. Rayco adelantó de nuevo a los suyos con un remate de cabeza cuando mejor estaba el Leioa, los jugadores no se lo creían.
Pero el gol no les hizo bajar los brazos y siguieron luchando para volver a empatar la contienda. A partir de ahí, el Logroñés aguantó muy bien las embestidas de los locales y comenzó a utilizar las contras como método para matar a su rival. Lambea hizo sus cambios pero el ansiado gol no llegaba. El colegiado añadió tres minutos, y a falta de un minuto, Goti hizo temblar los cimientos de la grada de Sarriena con una volea desde fuera del área que se coló por la escuadra del conjunto riojano. Nadie podía creerse el espectacular gol que acababan de ver y que valía un punto de oro.
El partido terminó en tablas y en un justo reparto de puntos. Los leioaztarras se colocan momentáneamente octavos con 43 puntos, mientras que el Logroñés ocupa la sexta posición en la tabla con 48. A pesar de que ambos conjuntos salieron con la idea de llevarse los tres puntos, seguro que, tras analizar el encuentro, dan por bueno el empate.