Fernando Alonso volvió a brillar en Singapur, evidenciando que, a poco que le den un coche algo competitivo, es capaz, ya no solo de dar un buen resultado, de dar una exhibición, como la ofrecida en la última carrera, donde fue votado como piloto del día. Está listo para 2026, pero hay algo que preocupa, y mucho, la capacidad del equipo Aston Martin en el garaje, que a punto estuvo de volverle a arruinar la carrera al ovetense. Por suerte, se impuso el piloto, pero no suele ser habitual.
Fernando Alonso, listo para 2026
Fernando Alonso está más que listo para afrontar la que podría ser su última temporada en la F1, y ayer volvió a demostrar que talento y capacidades no le faltan. En una de las carreras más duras del campeonato, un GP de Singapur donde los pilotos pierden entre 3 y 5 kilos, logró un meritorio séptimo puesto, lo máximo que podía sacar del coche si no había incidentes, pero fue el mejor piloto del fin de semana, así lo votó el público de todo el mundo, porque fue un espectáculo verle darlo todo y adelantar en pista, protagonizando una actuación que no pasó desapercibida para nadie.
Poco o nada se están jugando el ovetense y Aston Martin esta temporada. Tal y como está el campeonato, el único objetivo es poder igualar el quinto puesto de constructores de la pasada temporada, pero ni importa realmente eso y tampoco es factible que lo vayan a lograr, viendo el calendario que queda por delante. Lo único que hace falta es llenar la mochila de la confianza, lograr sacar el máximo partido a todo para que el equipo llegue motivado al 2026, pero precisamente el equipo, no dejan de darnos motivos para temer lo peor.
Un nuevo fallo de Aston Martin
Fernando Alonso tuvo dos carreras: en la primera mitad tenía que mantener las posiciones ganadas en salida y no desgastar un neumático blando para así poder retrasar la parada todo lo posible. Tal era la poca degradación del AMR25 que le permitió tener un ritmo muy elevado, que lo fue más cuando apuraba la parada. Un gran trabajo para asegurarse la octava plaza, buenos puntos para el equipo. Sin embargo, todo se pudo ir al traste con su parada, 9 segundos para cambiar los neumáticos, por una pistola que no encajaba.
Como ha dicho el piloto en muchas carreras, parece que las cosas malas solo pasan cuando el equipo va bien, porque cuando hacen una mala carrera, todo va como la seda. Parecía que, de nuevo, el equipo podría arruinarle la carrera y comprometer unos puntos importantes para el equipo. Por suerte, Alonso lo arregló.
Escalada hasta el séptimo puesto
Tocaba recuperar el tiempo perdido en pista, y para ello, tocaba adelantar en una pista casi imposible para hacerlo. Pero fue sorteando piloto a piloto, metiendo presión a cada uno de sus rivales, con un neumático medio que le duró hasta el final de carrera. Logró recuperar todo el tiempo perdido, hasta volverse a colocar en la octava posición en la que finalmente acabaría la carrera. Su actuación no pasó desapercibida, y pese a que el equipo falló, el lo enmendó. La sanción posterior a Hamilton le hizo ganar una posición.
Fue un gran resultado, pero preocupa el nuevo fallo en el garaje. El equipo aspira a pelear por lo más alto a partir de la próxima temporada, y para lograrlo, hace falta que todo funcione, empezando por que salga bien el diseño de Newey y terminando por el piloto, y entre medias, el equipo debe darlo todo para no fallar, y de momento, no están haciendo un buen trabajo. Hay poco margen para 2026 y es importante que se aproveche cada minuto para hacer las cosas mejor.