Los New Orleans Pelicans y los Philadelphia 76ers se enfrentaron en la madrugada de este domingo con un resultado de 131a 124 para los de Nueva Orleans.
Los Pelicans venían de perder tres de sus últimos 5 encuentros, alternando victorias frente a los Nuggets y a los Blazers (dos rivales directos en la clasificación) con derrotas como la del sábado frente a los Kings, frente a los GSW y vs Utah. Las sensaciones no eran excesivamente buenas, acumulan demasiadas derrotas y dependen demasiado del acierto de sus dos estrellas, y en estos últimos encuentros, de si Cousins tiene el día de gracia. Por el lado de los de Philly, las bajas de Embiid, Covington, y de su pick 1 del pasado draft, Fultz, pesan mucho en un equipo que acusa no tener una buena segunda unidad. Deberán aguantar hasta que de nuevo puedan tener a su quinteto titular sano para tratar de seguir escalando posiciones en la clasificación.
Comenzaba el partido. Los Sixers imprimiendo un juego muy veloz de la mano de Simmons, mientras que los Pelicans movían mucho el balón para encontrar a uno de sus dos hombres altos. Davis se gustaba y anotó los primeros 7 puntos de su equipo. La intensidad e igualdad en el choque nos llevó a llegar igualados hasta el final del cuarto. Tal era el ritmo del partido, que tras una discutible falta de Booker a Holiday en una entrada, en la siguiente jugada, con mismos protagonistas, Booker no dudó y esta vez sí, sin falta, taponó al base de los Pelicans y silenció el pabellón.
El segundo cuarto iba a ser el duelo entre los dos bases, por ser el más generoso con sus compañeros. Rondo y Simmons. Novato frente a veterano. Ambos se gustaban en la pista. Asistían, corrían, dirigían el juego a su antojo. 5 asistencias en el cuarto para el rookie, 8 para el all star. Solo un apagón de uno de los dos equipos podía abrir el marcador. Y sucedió en los dos últimos minutos del cuarto. 11-3 de parcial a favor de los de New Orleans con un triple de Moore para acabar la primera parte y que por primera vez en el encuentro ponía la ventaja en el electronico por encima de los 10 puntos.
Segunda parte y desconexión de los Pelicans. Parecía que no habían salido aun de vestuarios. Se dejaron remontar en cuestión de instantes, permitiendo un parcial de 14-2, con pérdidas incomprensibles y con el rebote dominado por Saric. De nuevo, igualdad en los siguientes compases del partido, hasta que de nuevo, un arreón de los 76ers abrió brecha en el marcador. Coincidió con sus mejores minutos de juego, con un Booker extramotivado y un Redick que se encargaba de ejecutar.
Inicio del último cuarto, con todo aun por decidir, aunque Philadelphia contaba con una pequeña ventaja, que desperdició con varios errores en ataque, y permitió a los Pelicans ponerse de nuevo por delante en el marcador de la mano de sus estrellas, Davis y Cousins, junto a Holiday, invitado especial, con un recital en el último cuarto. Se destapó el point guard de los Pelicans, con 19 puntos en este cuarto, con un soberbio 5/6 en triples que puso en pie al pabellón. Nada pudieron hacer los 76ers que vieron como se les escapaba la victoria sin que Simmons, que seguía intentándo la heroica, pudiera dar la vuelta a lo que ya estaba sentenciado.
Los hombres claves del encuentro fueron Holiday con 34 puntos y Rondo con un doble doble de 13 puntos y 18 asistencias. Los dos hombres altos de New Orleans tuvieron ambos más de 20 puntos y contribuyeron a que su equipo se llevase la victoria. Por parte de los 76ers, Redick como máximo anotador de su equipo, con 28 puntos, y Simmons con un doble doble de 27 puntos y 10 asistencias.
@alvaritoo_5