El efecto Gaizka Garitano

Arrancar en un equipo nuevo siempre es complicado, más aun cuando se trata de un filial, por eso mismo, Gaizka Garitano tiene un mérito enorme en la labor que está realizando en el Bilbao Athletic estos meses que lleva de míster del filial rojiblanco, y es que, contra todo pronóstico, pues el equipo es peor que el de la temporada pasada, y tras la discreta pasada en campaña de los cachorros en la Segunda División B, ha terminado el año 2017 en posición de playoff de ascenso, superando además los registros del año que los cachorros ascendieron a la Liga 123.

Y es que con los números en la mano, la primera temporada de Gaizka Garitano al frente del filial rojiblanco es la tercera mejor de las ultimas nueve del filial rojiblanco en la división de bronce del futbol español, por detrás de los dos primeros intentos de ascenso con Ziganda a los mandos, en el primero el filial cayó en el playoff, y en el segundo, fue quinto clasificado en la Liga.

Un arranque esperanzador

Los comienzos en un equipo, como ya se han comentado, nunca son fáciles, aun así, tras un pequeño varapalo en el arranque de temporada, donde los cachorros cayeron por 1-2 frente a la UD Logroñés en Lezama, el equipo se repuso, y cosechó un total de cinco partidos sin conocer la derrota en las seis primeras jornadas, aunque el arranque tampoco era para tirar cohetes.

Los cachorros cosecharon primero dos victorias consecutivas, la primera en el derbi frente a la Real Sociedad B por 0-3, y la segunda, por  1-0 frente al Real Unión de Irún. Todo esto se quedó en sabor agridulce cuando el equipo cosechó tres empates consecutivos, frente a Arenas de Getxo 2-2, Gernika 0-0 y Mirandes, 1-1 antes de entrar en la peor fase de la temporada.

Octubre negro

Y es que el mes de octubre para el filial rojiblanco no fue demasiado bueno, pues en cinco choques solo se obtuvo una victoria, la que obtuvieron en el segundo choque del mes frente al Peña Sport en Lezama por 4-1, tras dos encuentros que dejaron mucho que desear para la parroquia bilbaína, un empate frente al Sporting B en Lezama 1-1 y una derrota en El Sardinero frente al Racing por 1-0.

Para terminar el mes, un nuevo empate, frente al Izarra lejos de Lezama 2-2 y una nueva derrota frente al Leioa por 1-0, que llegaba como líder de la categoría, tocaba levantar la cabeza, si los cachorros querían acabar bien el año.

Espectacular racha

Y se levantó, vaya si se hizo. Los rojiblancos han enganchado desde el 1 de noviembre hasta la fecha actual una racha de ocho encuentros sin conocer la derrota, lo que les ha permitido meterse en la zona de playoff de ascenso para cerrar el año. Una victoria frente al Vitoria por 1-0 precedió a tres empates frente a Barakaldo, Burgos y Amorebieta, todos por 1-1.

Lo mejor estaba por llegar y es que en este periodo navideño, el filial del Athletic ha enganchado cuatro victorias consecutivas, frente a Caudal 2-0, Lealtad 0-1, Osasuna B 2-0 y Tudelano 0-1, lo que además supone la mejor racha sin encajar de los cachorros, con cuatro partidos sin conocer la derrota, lo que les da esa cuarta posición.

Todo esto, con plantilla renovada

Cabe recordar además, que el filial rojiblanco ha experimentado cambios en la plantilla, que han hecho que los de Garitano sean peor plantilla que la temporada pasada. Es cierto que los Areso, Benito, e Iñigo Vicente refuerzan al equipo, las bajas de Jurgi Oteo, Unai Núñez, Iñigo Córdoba, Bengoa y Asier Villalibre tienen mucho más peso, por lo que comparando puntos y plantilla, la labor de Gaizka Garitano está resultando milagrosa.