La enfermería rojiblanca pierde inquilinos

El próximo viernes el Sporting regresa a los entrenamientos en la Escuela de Fútbol de Mareo. Por delante tendrán un total de siete sesiones de entrenamiento para preparar el primer partido del año frente al Córdoba. Un partido para el que Rubén Baraja verá aumentada su lista de jugadores disponibles. Y es que este parón navideño le ha venido muy bien a una enfermería rojiblanca que va perdiendo integrantes.

El Sporting afrontó el último partido del 2017 con cuatro lesionados: Sergio Álvarez, Lora, Carlos Castro y Álex López. Además dos jugadores, Bergantiños y Calavera, actuaron en el partido pero tras recuperarse in extremis de unas molestias. De esos seis jugadores que estaban o pasaron por la enfermería en la previa del partido de Granada, se espera que todos estén disponibles desde el primer día de entrenamiento. Todos con la excepción de Álex López. El ferrolano está próximo a cumplir los tres meses en el dique seco debido a una ciatalgia (ciática aguda) que le tiene parado.

El último partido disputado por el gallego fue el pasado 1 de Octubre en El Sadar. En aquel encuentro fue titular y disputó los noventa minutos en la derrota sportinguista por 2-0. Una semana más tarde estuvo en la convocatoria frente al Sevilla Atlético, pero sin llegar a actuar. Fue la última vez que entró en una lista, pues escasos días después entró en la enfermería aquejado de una ciática. Una dolencia que a día de hoy no ha superado. Lo único que se ha visto al mediocentro ha sido en alguna sesión esporádica de carrera continua acompañado del fisioterapueta del club, César Castaño.

Los otros casos de jugadores que concluyeron el 2017 en la enfermería estarán a disposición. Tanto Lora, como Sergio Álvarez y Carlos Castro se espera ya entren en la dinámica del grupo desde las primeras sesiones de entrenamiento. Sin duda buenas noticias para el preparador vallisoletano, que tendrá más efectivos a disposición para comenzar el año en buena dinámica y agradar al público local de El Molinón como hizo en su debut en el banquillo sportinguista.

El viernes por la mañana será un día de mucha actividad en la ciudad deportiva rojiblanca. Los jugadores deberán pasar por la báscula, con riesgo de multas económicas en caso de haber subido de peso. El preparador físico, Manuel Poblaciones, ha sido muy estricto con los jugadores y no les permite ninguna ganancia de peso. Todo aquel que haya subido de peso podría ser sancionado. Posteriormente a la cita con la báscula tendrá lugar el primer entrenamiento. El plan de trabajo hará a los rojiblancos entrenar todos los días hasta el día antes del encuentro, con la excepción de Año Nuevo, cuando la plantilla tendrá descanso.

Sin novedades en el mercado

Lo que está más parado es el capítulo de altas y bajas. La dirección deportiva trabaja para incorporar al ansiado extremo y a un mediocentro de carácter ofensivo. Así como en dar salida a los jugadores que no cuentan para el cuerpo técnico. Por el momento no hay novedades y no parece que antes del viernes haya ninguna novedad, por lo que regresarán al trabajo las mismas caras que se fueron de vacaciones el pasado día 21.