Los Oklahoma City Thunder volvieron a vencer a los Golden State Warriors de manera aplastante, esta vez en el Oracle Arena como campo de la batalla. Fue un partido entretenido al principio, pero aburrido al final dada la ventaja que consiguieron los Thunder sobre su rival, siendo protagonistas Russell «Hustle» Westbrook con 34 puntos, 9 asistencias y 9 rebotes, y Paul George (38-3-5). En el lado de los Warriors, podemos destacar el trabajo anotador de Kevin Durant (33-1-6) y un no tan acertado Steph Curry, que a pesar de sus 21 puntos acabó el partido con un 2/9 en triples. Draymond Green, que no aportó mucho al ataque, fue uno de los que más se esforzó en la defensa y destacó por ello, sin embargo, no acabó el partido pues fue expulsado tras su segunda falta técnica de la noche, liderando así la liga en ese aspecto con 13 faltas técnicas.
El primer cuarto fue un magnífico despliegue ofensivo por parte de los Thunder, en concreto de Russell Westbrook, que consiguió acabar el primer asalto con 21 puntos en su cuenta particular fallando muy pocos tiros. En general, los de Donovan se vieron muy seguros en el tiro, hecho que contrastaba con los Warriors, donde el único que estaba consiguiendo buenos porcentajes de tiro era Kevin Durant, quien permitió que el equipo no se hundiera antes de tiempo. El primer cuarto terminaba 42 – 30 para los Thunder de Russ.
Comenzaba el segundo cuarto y el protagonismo ahora era para las segundas unidades de cada equipo, en un lado lideradas por el titular Paul George, en el otro por el titular Draymond Green. Fue un cuarto muy parado, con defensas muy físicas, con constantes interrupciones y tiempos muertos, lo que quizá pudo venir bien a los Warriors para intentar frenar las rachas anotadoras que los visitantes tenían desde el primer cuarto. Vimos un buen trabajo de Patrick Patterson y Jerami Grant por parte de los Thunder, que hicieron un gran esfuerzo bajo los tableros para conseguir segundas oportunidades y afianzar una defensa bastante sólida. En los Warriors, vimos a un buen David West y a un duro Green en la defensa, que mantenían a flote al equipo, al final del segundo cuarto, el roster titular volvió al campo y las cosas siguieron prácticamente el mismo rumbo que en el primer periodo. Nos íbamos al descanso con un 70 – 57 para los de Oklahoma.
En la segunda mitad nada cambió, excepto que Paul George se vino arriba y comenzó a dar su espectáculo particular que afloró en el tercer cuarto y le duro hasta el final, dejándonos un bonito baile que Durant no pudo seguir y un mate frente a Zaza Pachulia que quedó inmortalizado para póster. Los Warriors seguían en su misma dinámica de fallo tras fallo, y les costaba mucho avanzar en el marcador, de manera que la desventaja era muy abultada hasta que llegó en cierto punto que se transformó en insostenible, perdiendo por más de 20 puntos durante toda la segunda parte. Es destacable todas las faltas que se pitaron durante las rectas finales del encuentro, que tuvo como mayor víctima a Draymond Green, quien tuvo que abandonar el parqué con 2 faltas técnicas. En los minutos finales del encuentro vimos jugar a todos los suplentes de ambos equipos, pues ya no había nada que hacer, el partido acabó 125 – 105 para los Oklahoma City Thunder, que demuestran que este año son muy capaces de vencer a los equipos más grandes, al menos, en temporada regular.
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