El partido comenzaba con una mano providencial de Alfonso Herrero al remate de Barral en el minuto 4. Tras ese momento inicial, el partiodo pasó por un momento en el que no tenía dueño. Tanto Cádiz como Oviedo esatban viendo de donde cojea cada uno. El partido estaba siendo duro en el centro del campo y ninguno de los equipos tenían ocasiones de gol.
El partido seguía sin ocasiones pero con muchas tarjetas, incluída una más que dudosa roja a Rocha que dejaba al Oviedo con uno menos en el minuto 33. En el 38′ tuvo el Oviedo una oportunidad a balón parado. Cifuentes salvó con una gran manopla la falta de Saúl Berjón.
El partido se calentó demasiado tras la expusión de Rocha. Con el 0-0 en el marcador se llegaba al descanso. Partido duro en la primera parte donde ni Cádiz ni Oviedo hicieron su mejor fútbol.
Ya en la segunda mitad Cervera introdujo un doble cambio buscando aprovechar su superioridad numérica para ir a por todas. Sin embargo, el gol llegaría en el bando carbayón. Un gol casi sin querer y con la nuca de Linares tras un centro al área.
Tras el gol Anquela movió banquillo para poner una defensa de cinco ante un Cádiz que apretaba buscando el empate. De hecho en el 67′ remató Álvaro al larguero. Gran jugada de Salvi y el remate del delantero impactó en la baliza. No hubo larguero en el 72′ cuando el Cádiz consiguió el empate con un golazo. Con el balón escorado, Perea se hizo hueco con dos dribling y metió el balón en la escuadra contraria para empatar el partido.
No tardaría mucho en llegar el segundo de los gaditanos. En un córner de cabeza, Servando adelantó al Cádiz que remontaba así el partido. Más allá de estar con 10, el Oviedo ofreció poco en la segunda mitad, mientras que el Cádiz tuvo más pegada. En el 88′ Alfonso Herrero metió la mano y envió el disparo de Salvi a córner.
Tres puntos de oro para el Cádiz ante un rival muy complicado y en un partido en el que árbitro cobró protagonismo.