El domingo, Juan Antonio Anquela recuperaba a su jugador más utilizado. Ramón Folch, que vio la quinta amarilla ante el Barça ‘B‘, se perdió sus primeros minutos de la temporada ante el Tenerife. En la isla, los azules notaron su ausencia. Cayeron por 3-1 en un partido donde el equipo estuvo falto de equilibrio. Tampoco tuvo demasiado criterio a la hora de construir juego. En definitiva, faltó el catalán, clave para los azules en lo que va de temporada.
Al margen de lo que supone Folch para el equipo, su vuelta tuvo otro aspecto positivo. Forlín volvió a su sitio natural, el centro de la zaga. Pero volviendo a Folch, el catalán fue, sin duda, la mejor noticia para Juan Antonio Anquela. Y el equipo lo notó. El juego giró en torno a él. Porque da la sensación de que los futbolistas azules juegan más cómodos con Folch como ancla. El catalán marcó la pausa y el ritmo de juego. Siempre optó por el mejor pase. Jugó con mucho criterio, sin complicarse, sin perder el balón. Un esférico que perdió en once ocasiones. Muy pocas para la cantidad de minutos que la pelota estuvo en sus pies.
En defensa, Folch es un pilar básico dentro del equipo. Ante el Granada, fue el jugador que más balones recuperó. Un total de 8. Porque Folch es de esos jugadores que en raras ocasiones salen a hombros del verde. Hace ese trabajo que no se ve. Porque a diferencia de otros, ni evita goles, ni está en los metros finales para darlos o marcarlos. Es distinto. Ese futbolista que desean todos los entrenadores.
Y el partido de Folch no acabó ahí. Junto a él estuvo Mariga. La sorpresa saltaba una hora antes del inicio del choque, cuando Anquela optó por el keniata en la medular. A él se le vio más. Pero precisamente por eso, por ser la novedad. Mariga cuajó un encuentro sensacional. Sin rehuir los choques, jugando fácil. Fue de más a menos en el encuentro. Pero la comodidad con la que jugó la mayor parte del encuentro se la debe a su compañero en el centro del campo. Porque Folch le hizo la vida mucho más fácil.
Entrenamiento en El Requexón
La primera plantilla del Real Oviedo ha comenzado a preparar el encuentro de este sábado ante el Córdoba en El Nuevo Arcángel. Los azules se han ejercitado en las instalaciones deportivas de El Requexón. Los futbolistas con más carga de minutos ante el Granada realizaron un trabajo regenerativo. El resto de los jugadores, completaron un entrenamiento más intenso. Mañana, a partir de las 10:30 horas, los azules volverán a ejercitarse en El Requexón.
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