No es ninguna novedad que se hable de Nacho Fernández. El central español se ha convertido en uno de los centros de los elogios por el gran estado de forma en el que está envuelto el Real Madrid. Además, fue uno de los pocos jugadores que se salvó del aluvión de críticas por la mala primera parte de La Liga y de la Copa del Rey en general.
Tras la salida de Pepe el pasado verano y el ascenso de Jesús Vallejo al primer equipo tras haber estado cedido en el Zaragoza, sólo Sergio Ramos y Raphael Varane estaban por delante de Nacho. Una competencia que, a priori, le iba a costar muchos minutos en el banquillo si las lesiones respetaban a los hipotéticos centrales titulares. Al final, todo lo contrario.
Nacho ha jugado en la actual temporada 36 partidos, en los cuáles ha disputado 2952 minutos (una media de 82 minutos por partido) y ha anotado cuatro goles, llegando incluso a ser cruciales en momentos complicados para el Real Madrid. Es el central con más minutos de la zaga defensiva blanca, superando por más de un partido completo a Sergio Ramos y Raphael Varane.
Bien es cierto que ambos jugadores han sufrido sendas lesiones a lo largo de toda la temporada, que han sufrido rotaciones constantes y han estado sancionados. El camero ha disputado 32 partidos en los que ha sumado 2830 minutos, e iguala el registro goleador de Nacho con cuatro goles. Por su parte, el francés, ha jugado 33 partidos, en los cuáles ha estado sobre el terreno de juego 2811 minutos en los que no ha visto. Muy lejos quedan los números de un Jesús Vallejo que ha jugado siete partidos con el Real Madrid y apenas 554 minutos, aunque su caso está marcado por una grave lesión.
Nacho es el defensa más utilizado esta temporada por Zinedine Zidane, y el español ha respondido con nota en el campo. Su versatilidad es el mejor aval que tiene en el repertorio de su talento, lo que le ha llevado a, incluso, ser un recambio para Marcelo o Daniel Carvajal cuando los partidos eran importantes y no se confiaba en Theo Hernández y en Achraf Hakimi. Además, el buen juego de pies, su contundencia en el juego aéreo y la buena salida de balón hacen de él un buen complemento para sus compañeros.
En una competición donde los Sergio Ramos, Gerard Piqué, Diego Godín o Samuel Umtiti están brillando con luz propia, Nacho se ha colado en las quinielas y oposita seriamente a ser uno de los mejores centrales de La Liga. ¿La clave? El trabajo, la humildad y la seriedad que son el ADN del jugador del Real Madrid.
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