Hasta que Messi quiso

Comenzó la liga para Barça y Alavés en horario nocturno y con poca afluencia en la grada, pese a las fechas. 69€ la entrada para la afición visitante, encerrada en una caja de metacrilato y en lo alto del gallinero, también pueden ser causas.

Tras el calentamiento y de forma breve y casi a la carrera, el equipo catalán dedicó a su afición el trofeo de Supercampeón de España, recientemente conquistado ante el Sevilla C.F. en Tanger.

PRIMERA PARTE

Otro día más en la oficina para los locales cuando se enfrentan a un equipo a todas luces de inferior nivel. Los babazorros jugaban juntitos, en un 4-5-1, cerrando espacios por dentro para que Messi y los suyos no pudieran respirar con el balón en los pies. Los visitantes, como tantos otros antes, se la jugaban a coger alguna contra y acertar en la definición. Para ello sacó a los veloces Sobrino y Jony y la calidad en el pase de Ibai Gomez.

Dominio claro de los azulgranas, cercano al 75% de posesión en esta primera parte, y gran trabajo defensivo de los albiazules que pasaron algún apuro en la recta final del periodo, con una falta al larguero de, quién sino, Messi y de una mano a mano de Dembelé que atajó, sóbrio como siempre, Pacheco.

Los visitantes tuvieron poca llegada y tan solo dos aproximaciones con peligrode Sobrino tras pases de Jony e Ibai respectivamente.

SEGUNDA PARTE

Volvieron los equipos de los vestuarios como acabaron la primera mitad. Mandando los locales y sufriendo los visitantes y en el 47 Jordi Alba estrelló el balón en Pacheco.

Se sacudió un poco el dominio el Glorioso e inquietó en un par de llegadas con un disparo de Wakaso bloqueado por la defensa y un balón en profundidad de Sobrino para Jony que solucionó Ter Stegen con un sombrero saliendo del area.

Llegó el minuto 64 y tras un par de vertiginosos quiebros en la frontal, el astro argentino provocó una falta, y tras lanzarla por debajo de la barrera, y consiguió el gol número 6.000 del Barça en Liga. Dos minutos más tarde estrelló el esférico en el palo tras recortar en el area visitante.

Realizó cambios el Alavés buscando refresco y profundidad en medio campo  además de por la lesión de Sobrino, que le dieron aire a los visitantes, cambiando el dibujo a un 4-4-2 más reconocible.

Pasado el ecuador de la segunda parte, tuvo el segundo Suarez tras una indecisión de la defensa alavesista, y se quedó mano a mano con Pacheco que solucionó el extremeño aguantando lo indecible.

Rondando el minuto 80, tuvo una falta el Alavés, y tras una melé en la que cayeron varios jugadores, el remate de cabeza de Maripán salió no lejos del palo derecho de la puerta de Ter Stegen.

Con los babazorros buscando el empate, Coutinho la tuvo frente a Pacheco pero volvió a detener el cancerbero. Un minuto más tarde recibió en la esquina del area y, en su jugada, recortando hacia adentro, la colocó al palo largo y colgando el segundo en el marcador local.

Los visitantes se quedaron sin gasolina y volvieron a juntarse para no recibir un castigo mayor y el Barcelona sin apretar y solo aprovechando los errores visitantes debidos al cansancio como en el minuto 88 un disparo de Suarez que desvió Pacheco.

A falta de 30 segundos para cumplirse el tiempo añadido, Messi recibió un balon en profundidad sobre el punto de penalty, y con un control sublime se hizo el hueco necesario para remachar el tercero a la derecha de Pacheco, que pese a encajar tres goles, hizo un partido excepcional y salvó a su equipo de un resultado más abultado.

Como anécdota, Messi metió dos goles en dias diferentes en el mismo partido. Cosas de los horarios…