Parecía que este año no tocaba. Que muchos se iban a bajar del barco del Sporting. Que tras el naufragio en play-off ante el Valladolid, El Molinón esta temporada comenzaría más vacío que los últimos años. Pero no. Nada más lejos de la realidad. A cinco días para el primer partido en el feudo rojiblanco ya son 22.912 los fieles que alentarán al equipo esta temporada.
Y ese dato podría aumentarse esta semana, superando los 23.000 socios fácilmente. Lejos aún del récord de la temporada pasada, pero siendo uno de los mejores datos de su historia. Actualemente el Sporting es el segundo conjunto con más abonados en La Liga 1|2|3 tras el Zaragoza. No cabe duda que la mareona es fiel al Sporting. Siempre lo demuestra. Año tras año. Vengan buenas o vengan malas. Pero este año se esperaba que la marea no subiese tanto.
La pérdida de referentes en la plantilla como Sergio Álavarez y de identidad respecto al último ascenso dejó fría a la afición al comienzo de la pretemporada. Los fichajes de mano no convencían. Se volvió a un mercado internacional que tantos quebraderos de cabeza y malos recuerdos traen a la afición rojiblanca. Pero al final, la afición apoya al equipo. A día de hoy
Además los últimos refuerzos pueden darle un gran empujón a la cifra actual. La llegada estelar del delantero Uros Djurdjevic que ha colapsado las instalaciones de Mareo para ver su primer entrenamiento, o la inminente llegada de un extremo están creando gran expectación. El fondo de armario se vislumbra. El salto de calidad empieza a hacerse patente. Y el compromiso de los recién llegados con el proyecto es indudable. Y eso, sin duda, es algo que anima y engancha más aún a los sportinguistas. Su fe nunca decae.