Es internacional en las categorías inferiores de la selección española y el club no quiere hablar de su salida. Toni Lato, sin embargo, aspira a jugar más en el club de sus amores. El canterano valencianista cuenta con el obstáculo de la buena temporada que está haciendo Gayá, fijo hasta ahora para Marcelino. El de la Pobla de Vallbona ha estado siempre a la sombra del de Pedreguer y ha visto frenada su progresión. La fábrica de laterales izquierdos de Paterna parece no acabar nunca y por abajo Centelles también apreta fuerte.
El caso Alcácer pesa
El joven lateral izquierdo tan solo jugó ante la Real Sociedad y su ambición le lleva a pensar que puede jugar más. En su pensamiento también estarán las salidas de otros canteranos que fuera de Valencia han perdido protagonismo. Casos como el de Alcácer, Soldado y más gente criada en la Academia pueden influir en su decisión. Con el brexit en vías de ponerse en marcha, las opciones millonarias del mercado Premier van a empezar a desaparecer. El aspecto pecuniario es importante pero no definitivo en un jugador consolidado en la élite.
Son muchos factores los que su entorno debe valorar a la hora de buscarle una salida, de animarlo a ampliar sus miras futbolísticas. ¿Cesión? ¿Venta? El club, al menos oficialmente, no quiere ni oír hablar de su salida pero es conocida la necesidad de vender jugadores al final de temporada. Han de saber moverse y conocer las intenciones de la entidad de la Avda de Suecia. De los movimientos de Gayà pueden depender los de Lato.
Decisión a largo plazo
Parece evidente que su convivencia por muy largo tiempo será complicada dadas las aspiraciones deportivas de uno y otro. La idea de Marcelino al respecto y su continuidad en el proyecto blanquinegro también son elementos a sopesar. Las cartas están boca arriba y la decisión puede ser inmediata o tomada con más calma. La precipitación nunca es buena consejera y salir a mitad temporada nunca es garantía de estabilidad.
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@VicentSarrion