El pasado domingo, Isma Piñera debutaba esta campaña como entrenador del Sporting ‘B’. Lo hizo con una derrota por 2-3 frente al CD Calahorra en un encuentro muy gris del filial rojiblanco. Un Sporting ‘B’ que en los últimos años había destacado por su garra competitiva, el domingo no la mostró, siendo superado en casi todas las facetas del encuentro por el cuadro calagurritano.
En su anterior etapa en el filial rojiblanco, en la temporada 2015/2016, el entrenador gijonés tampoco pudo estrenarse con victoria. Cogió al equipo en la trigésimo tercera jornada, con el Sporting ‘B’ en el puesto de play-out con 32 puntos. Solo uno por encima del descenso y a uno de la permanencia, pero tras encajar dos sonrojantes derrotas que le costaron el puesto a Tomás Hervás como entrenador del filial. Su primer partido fue en Pasarón, donde empató 1-1 frente a un Pontevedra que acabaría jugando play-off de ascenso esa campaña.
Pero aunque de mano logró un empate y una victoria, Isma Piñera no fue capaz de reconducir aquella compleja situación y el Sporting ‘B’ acabó descendiendo tras sumar solo ocho puntos en esas últimas jornadas. La siguiente temporada hubo permuta de banquillos. José Alberto López, hoy entrenador del primer equipo promocionaría desde el juvenil de División de Honor al filial en Tercera División, con el que lograría el ascenso en un año. Isma asumió entonces esa vacante en el juvenil que ha ocupado hasta hace una semana.
Una situación muy distinta
En aquella ocasión hace dos años y medio, el gijonés se hizo cargo del banquillo en una situación muy complicada. Algo totalmente diferente a esta ocasión. El Sporting ‘B’ merodea en la zona medio alta de la tabla con veintitrés puntos, con mucha ventaja sobre el descenso y a unos escasos dos puntos del play-off. Pero el debut no ha sido mejor que en aquella primera etapa. Incluso ha sido a peor, pues si en su primera etapa fue un empate a domicilio; ésta vez fue una derrota en Mareo.
Por tanto se repite la circunstancia de que Isma Piñera no ha podido ganar su primer partido en las dos ocasiones que ha asumido el mando en el Sporting ‘B’. Quizá, si en el futuro hay una tercera, sí haga bueno el refrán de que: «A la tercera va la vencida».