El 2018 del Real Madrid, luces y sombras

El Real Madrid cierra un año marcado por las dos caras que ha vivido. En el club se ha pasado de un cierre de temporada encumbrados en la gloria de la Champions League a un final de año en el que la incertidumbre planea por encima del equipo.

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Vaya año para el Real Madrid. El sube y baja constante que ha sufrido el equipo en este 2018 toca la punta del éxito con la Champions League conquistada en Kiev ante el Liverpool, pero también toca fondo con la estructuración de la plantilla en verano que ha llevado a tener un entrenador destituido como Julen Lopetegui mucho antes de lo previsto.

Los números del Real Madrid en 2018

En lo meramente estadístico, el Real Madrid debe mejorar en este 2019 en varias facetas. Los números de victorias han sido más bajos que en años anteriores, y los goles en contra han aumentado de manera considerable y los goles a favor han disminuido, sobre todo desde la salida de Cristiano Ronaldo del club. Como dicen, los números no mienten, y estos son los que ha registrado el equipo blanco en este año natural de 2018.

Durante la segunda parte de la temporada 2017 / 2018, la que abarca a este segundo año, el Real Madrid registró, en total, 20 victorias, ocho empates y cuatro derrotas, con 87 goles a favor y 43 en contra. Unos números de gran peso que valieron para alzarse con la Champions League. Desglosando estos número, en La Liga se lograron 13 victorias, seis empates y dos derrotas con 64 goles a favor y 30 en contra; en la máxima competición europea se lograron cinco victorias, un empate y una derrota para 16 goles a favor y nueve en contra; y en Copa del Rey se lograron dos victorias, un empate y una derrota, con siete goles a favor y cuatro en contra.

Entre medias de una temporada y otra, el Real Madrid disputó la ya tradicional International Champions Cup, el torneo veraniego que enfrenta a los mejores equipos de toda Europa para que vayan cogiendo forma de cara a la nueva temporada. Cuatro partidos disputó el equipo blanco, y los saldó con tres victorias y una derrota, además de anotar nueve goles y recibir cinco.

Tras este pequeño escaparate, arrancó la temporada 2018 / 2019. Hasta el final de este año, los números del Real Madrid han perdido consistencia en todos los aspectos. En el total de competiciones, la entidad madridista ha registrado 17 victorias, dos empates y ocho derrotas, con 54 goles a favor y 31 en contra. En la Supercopa de Europa, la cual perdió el equipo blanco, se saldó con dos goles a favor y cuatro goles en contra.

Fue en La Liga se han logrado nueve victorias, dos empates y cinco derrotas, con 24 goles a favor y 19 en contra; en Champions League lograron cuatro victorias y dos derrotas, con 12 goles a favor y cinco en contra; en Copa del Rey se han victo dos victorias, con diez goles a favor y uno en contra; y, por último, en el Mundial de Clubes, trofeo que acabarían levantando, registraron dos victorias, con siete goles a favor y dos en contra.

Gareth Bale anota un gol en un Real Madrid – Kashima Antlers. Foto: Real Madrid Club de Fútbol.

La Champions League, el bálsamo blanco que hace historia

2018 siempre será recordado por los madridistas por el año en el que se ganó la Decimotercera. El Real Madrid alzó la copa de campeón de la Champions League en Kiev, ante un rival clásico de Europa, el Liverpool, en un partido que se decidió por 3-1. Pero, antes de eso, el año trajo consigo emociones desde octavos de final.

El Paris Saint-Germain fue el primer escollo al que tuvieron que enfrentarse los jugadores de Zinedine Zidane. Tras haber quedado segundos de grupo, el equipo francés amenazaba con apear de la competición al vigente campeón, que atravesaba una mala racha. Aún así, el Real Madrid enderezó el timón y le ganó los dos partidos al todopoderoso equipo parisino de NeymarKylian Mbappe. 3-1 en el Estadio Santiago Bernabéu y 1-2 en el Parc des Princes.

Los cuartos de final no fueron más sencillos tampoco. Aguardaba la Juventus, otro clásico europeo, que ya sabía lo que era eliminar al Real Madrid a doble partido en Champions League. La ida fue un desfile blanco, un 0-3 en el Juventus Stadium con una chilena de Cristiano Ronaldo que dio la vuelta al mundo (y al universo entero también). La vuelta, en cambio, fue un infierno. El Estadio Santiago Bernabéu no fue capaz de respirar hasta que el delantero portugués anotara un penalti en el descuento para poner el 1-3 que mandaría a semifinales al equipo blanco.

En la antesala de la gran final, el Bayern Munich. El equipo bávaro, que tanto odio ha cogido en los últimos años al Real Madrid, tenía un año más la reválida para destronar a los blancos. El resultado, eso sí, acabaría siendo el mismo. Los madridistas hicieron los deberes en el Allianz Arena con el 1-2, y en el Estadio Santiago Bernabéu defendieron ese marcador para acabar 2-2. Kiev esperaba.

El Liverpool sería el rival en la final y, viendo el camino del Real Madrid, parecía incluso el equipo más “débil” al que se había enfrentado. Los ingleses, con un fútbol muy directo, poca batalla pudieron plantar. Loris Karius se ejerció como protagonista con dos cantadas de portero de escuela, y Gareth Bale dio la vuelta al mundo con un gol de chilena. 3-1 y la historia blanca siguió creciendo. La “Decimotercera” era real.

Gareth Bale hace una chilena en un Real Madrid – Liverpool. Foto: Real Madrid Club de Fútbol.

Ni La Liga ni la Copa del Rey

La Champions League fue el parche perfecto para tapar lo que sucedió en el territorio nacional. El Real Madrid cayó demasiado pronto en la Copa del Rey, y no fue rival para el Barcelona en La Liga, que puso velocidad crucero y la afianzó un año más en su palmarés.

Aunque, realmente, los números en el 2018 del Real Madrid en La Liga no fueron malos, los blancos se dejaron muchos puntos en partidos que debían haber sacado adelante. Se dejó cinco puntos ante el Villarreal en los dos partidos que disputaron, dos contra el Athletic Club en el Estadio Santiago Bernabéu, algún tropiezo fuera de casa ante rivales menores como Celta de VigoLevante… Además de no saldar con victoria los partidos contra los rivales directos, el Barcelona y el Atlético de Madrid, pues ambos acabaron en empate. Un año más en el que la máxima competición nacional se escapaba, a pesar de las vistosas goleadas que lograron.

La Copa del Rey supuso un duro golpe para el Real Madrid y para un Zinedine Zidane en entredicho. Aunque las cosas empezaran bien tras eliminar al Numancia tras la victoria en el Nuevo Los Pajaritos por 0-3 y el 2-2 del Estadio Santiago Bernabéu, los nubarrones llegaron. El Leganés, que estaba cuajando una grandísima temporada en La Liga, sería el verdugo de los blancos. Tras el 0-1 en Butarque, los pepineros lograron la machada en el feudo madridista con el 1-2 y apearon de la competición a uno de los fijos en semifinales en los últimos años. Un palo muy duro en la línea de flotación del buque madrileño.

Mateo Kovacic regatea a Gabriel en un Real Madrid – Leganés. Foto: Real Madrid Club de Fútbol.

El verano del ciao Cristiano Ronaldo y ciao Zinedine Zidane

Quizás el verano de 2018 haya sido el peor momento de la historia reciente del Real Madrid. Tras confirmarse que Zinedine Zidane abandonaría al final de temporada el banquillo del equipo blanco, el descontrol sobre la plantilla fue mayúsculo. Fue la primera ficha de dominó en caer de unas cuantas.

El verano fue muy movidito en el Real Madrid. Varias fueron las salidas, aunque ninguna fue tan dura como la de Zinedine Zidane y la Cristiano Ronaldo. El técnico francés, que había llevado al equipo blanco al podium de los mejores del mundo, abandonaba el barco alegando que veía que su tiempo había acabado. Por su parte, el portugués abandonó el club de manera un tanto fea, pues exigía un aumento de sueldo que Florentino Pérez no le concedió. Un gesto que le llevó a desembarcar en la Juventus, un lugar donde sigue manteniendo el nivel de uno de los mejores del mundo y desde donde lanza dardos a la que fuera su casa.

A estas salidas se les debe sumar las de Philipp Lienhart al FriburgoLucas Torró al Eintracht FrankfurtAchraf al Borussia Dortmund cedido, Mateo Kovacic al Chelsea cedido, Theo Hernández a la Real Sociedad cedido, Martin Odegaard al Vitesse cedido, Raúl de Tomás al Rayo Vallecano cedido, Lunin al Leganés cedido, Borja Mayoral al Levante cedido, y Fabio Coentrao rescindió su contrato.

Aunque no todo fueron salidas para el Real Madrid. Llegó un nuevo entrenador, un Julen Lopetegui que vivió una salida muy fea como seleccionador española con un injusto tratamiento por Luis Rubiales. Bajo su brazo llegaron Andriy Lunin del Zorya Luhansk (aunque ha acabado cedido en el Leganés), Álvaro Odriozola de la Real SociedadThibaut Courtois del Chelsea, y Mariano Díaz del Lyon. Unos refuerzos que, como ha ido demostrando la temporada, han sido insuficientes para hacer olvidar la marcha de Cristiano Ronaldo.

Cristiano Ronaldo celebra un gol con la Juventus. Foto: Juventus Football Club.

La Supercopa de Europa auguraba un mal camino

Se volvía a ver un derbi madrileño en una final de nivel europeo. El Le Coq Arena de Tallín era el escenario elegido por la UEFA para disputar la final de la Supercopa de Europa entre Real Madrid, como campeón de la Champions League, y Atlético de Madrid, como campeón de la Europa League. Un partido siempre atractivo que dividía a una ciudad una vez más.

El partido se acabaría decantando del lado del Atlético de Madrid por 2-4 en la prórroga. El doblete de Diego Costa y los goles de Saúl ÑíguezKoke valieron más que los goles de Karim BenzemaSergio Ramos. El primer partido oficial de Julen Lopetegui acabó con un naufragio, y en una final, aunque lo demostrado en el terreno de juego no hiciera justicia del todo al marcador final.

No empezaba bien la era Lopetegui, y sólo era el principio. Sin los goles de Cristiano Ronaldo, la felicidad duró poco en el equipo. Tras un arranque bueno del Real Madrid en La Liga, llegaron los problemas y las derrotas, sumado a una mala racha que acabó con la destitución del entrenador español tras salir goleado en el Clásico ante el Barcelona por 4-1. Llegó la era Santiago Solari.

Llegó Solari, el Mundial de Clubes y la tensa calma

El 30 de octubre se acabó la era de Julen Lopetegui como entrenador del Real Madrid. El 4-1 ante el Barcelona cosechado en el Camp Nou fue la sentencia del entrenador español. Con muchos nombres sonando para el banquillo blanco, como fueron los de Antonio Conte o Roberto Martínez, finalmente ha llegado para quedarse Santiago Solari.

El técnico devolvió a la senda de la victoria al Real Madrid, con un juego igual de dudoso, pues el público del Santiago Bernabéu ha seguido manifestando su descontento en ciertas ocasiones con el juego de su equipo, pero al menos ya se sumaba de tres en tres. Clasificados para octavos de final de la Champions League (donde espera el Ajax), cuartos en La Liga con un partido menos a ocho puntos del líder, clasificados para octavos de final de la Copa del Rey (donde espera el Leganés), y habiendo levantado ya un título, el Mundial de Clubes.

El 2019 aparece como un año duro para el Real Madrid, que va a tener que demostrar que hay vida tras Cristiano Ronaldo, y que deberá reforzar la plantilla para pelear por todo. A día de hoy, parece muy difícil lograr un triplete, pero Santiago Solari tiene plantilla para llevar al equipo hasta el final, pelear todos los títulos, y levantar alguna copa más al final de la presente temporada. Arranca el camino.

La plantilla del Real Madrid celebra un Mundial de Clubes. Foto: Real Madrid Club de Fútbol.
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