A las 19:30 de mañana, miércoles 16 de enero, se disputará la vuelta de los octavos de final de la Copa del Rey. Mañana, la capital española tiene una cita importante, puesto que en el Wanda Metropolitano se medirán frente a frente el Atlético de Madrid contra el Girona FC. Un duelo con un empate en la ida como precedente y que da una ligera ventaja a los de Simeone.
El partido disputado en Montilivi empezó con un tempranero gol del máximo ariete rojiblanco, Antoine Griezmann, pero minutos más tarde a diez minutos de finalizar la primera parte llegaría el empate de los locales, por mediación de Lozano. En el caso de producirse un nuevo empate, esta vez sin goles, daría el pase al conjunto que mañana será local, de ahí que partan con cierta ventaja.
El conjunto catalán deberá salir al césped del Metropolitano a anotar un gol que rompa con la ventaja inicial. Eusebio Sacristán se muestra optimista y es que siguen invictos en todos los encuentros que han disputado frente al Atlético de Madrid, también el equipo madrileño. Ninguno de los dos equipos ha conseguido ganar al otro.
Los visitantes se encomiendan a su estrella y tercer máximo goleador deLaLiga, Stuani, a día de hoy pretendido por FC Barcelona, para hacer posible la hazaña. Nuevamente, no necesitan doblegar al equipo de Diego Pablo Simeone. Ambos equipos podrían seguir siendo incapaz de vencer al otro y de la misma manera pasar de ronda.
Para poner en situación: el cero a cero mandaría a la siguiente ronda al Atlético de Madrid, si se repite el marcador de la ida el partido iría a prórroga y si el marcador es de dos a dos, o números superiores (manteniendo el empate) permitiría al Girona estar en la siguiente fase. Obviamente, la victoria certificaría el pase de quien la consiga.
Los locales viene de una buena victoria en casa, independientemente de la polémica y el resultado el equipo ‘colchonero’ mostró argumentos suficientes para preocupar a su rival de mañana. En cambio, el Girona sigue inmerso en una racha de tres empates consecutivos, sin contar el de Copa. Podría ser mañana un buen día parar romper con tanto empate.
No existe la opción a especular, jugar con la eliminatoria podría suponer un golpe del que quizás ninguno de los equipos pueda reponerse. La eliminatoria queda abierta entre dos equipos incapaces de dar con la tecla para ganar a su rival. El espectáculo estará servido en el Metropolitano.