Todo hacía indicar que, el último día de cierre de mercado, seguiría todo con normalidad en las oficinas del Nuevo Vivero hasta que Pablo Blázquez, presidente del club, dio una entrevista para radio Canal Extremadura ayer mismo donde trató temas de la actualidad, entre ellos el de fichajes. Hacía referencia a que llegarían dos fichajes más, aunque para que se hiciera posible uno de ellos, tendría que salir alguna ficha senior de la plantilla, y así ha sido. Ezequiel Lamarca ponía punto y final en su etapa en el C.D.Badajoz, con un sabor amargo ya que se esperaba mucho del jugador cordobés de 27 años, quien la temporada anterior marcó la friolera de 12 goles en 37 partidos siendo mediapunta.
Así pues, Lamarca se une a los sub-23 Javier Alonso (Izarra), Renato da Silva (UCAM B), Nil Coch (finaliza cesión) y David Aparicio (cuyo destino se desconoce todavía). El futbolista pone rumbo a El Ejido, equipo del mismo grupo que ocupa la 14º posición en la tabla.
Llegó el último día y llegaron dos jugadores como hacía indicar, por sorpresa el día anterior, el presidente pacense: el desconocido delantero inglés de 19 años Jordan Greenidge, forjado en la cantera del Stoke City y que esta primera parte de la temporada ha jugado 6 minutos con el Omonia Nicosia chipriota.
Según el comunicado del club pacense, se trata de un delantero con una gran potencia física, gran capacidad para
proteger el balón y jugar de espaldas a la portería; y Alfonso Candelas, lateral izquierdo de 23 años que viene cedido del Extremadura UD, donde el curso pasado ayudó en el ascenso a Segunda División y que ha jugado esta primera mitad de temporada con la U.D. Ibiza 18 partidos. El jugador nacido en Ciudad Real es considerado como un futbolista de nivel contrastado en la categoría de bronce, ya que ha pasado por clubes como Cartagena y Villanovense. También puede actuar de extremo izquierdo, por lo que sumaría mayor polivalencia a la plantilla.
Con estos dos nuevos fichajes, se cierra una plantilla conformada por 21 jugadores, tal y como se quería, y se confía que suban el nivel de una plantilla ya compensada que aspira a cotas mayores que quedarse en mitad de tabla.