Duelo regional para terminar de coger aire y tranquilidad en los anexos del Jose Zorrilla entre el Real Valladolid B y Unionistas de Salamanca.
Ante unas abarrotadas gradas ambas escuadras hacían presencia en la soleada mañana acontecida en la capital de Castilla. Y es que unos 500 aficionados visitantes dieron color y ambiente desplazados desde la vecina Salamanca.
Comenzaba el partido con ambos equipos posicionados en sus respectivos campos, tratando de manejar el cuero sin abusar de riesgo.
La primera ocasión llegó en botas de Waldo, no sin polémica, ya que con un jugador salmantino en el suelo continuó una jugada por banda izquierda que por poco nl rompe la igualdad inicial en el marcador. Corría el minuto 7. Mucho protestaron los visitantes el no haber parado Iara dar entrada a las asistencias.
Con esta primera ocasión pareció que Unionistas se preocupó un poco más de defender en sus zonas de retaguardia que apostar por el dominio del esférico. Los siguientes minutos el Real Valladolid B fue amo y señor del balón, circulando sin excesiva complicación en campo contrario, aunque no consiguió intimidar más que con eso la meta rival, no hubo ocasiones destacables. Los visitantes por su parte, llegaron a los 25 minutos con tan solo una ocasión en su haber, fruto de un cabezazo de Admonio en saque de falta lateral.
Y es que el dominio local se fue diluyendo y si ya el Promesas no fue capaz de inquietar la meta salmantina, Unionistas a base de córners fue capaz de de poner nerviosa a la parroquia blanquivioleta. La más clara, por decir algo, la tuvo Garrido, tras golpear su disparo en el rechace de un córner en un defensor vallisoletano.
A falta de 15 minutos para el final del primer acto parecía un punto más sólido el equipo hoy de verde pistacho.
Pero cosas del fútbol, corría el minuto 36 cuando una jugada por banda derecha nacida de un pase de El Hacen hizo que Raúl Navarro sorprendiera con un chut seco pegado al palo a Molina. Quizá el meta le pilló por sorpresa.
El gol nl hizo más que animar el encuentro, ya que dos minutos más tarde llegó la más clara para el conjunto charro. De nuevo Adminio con un portentoso cabezazo a saque de falta hizo lucirse a Samu Pérez, que hizo la parada del partido, sacando la bola a córner.
Una lástima para el espectador neutral que solo quedarán 5 minutos para la conclusión de la primera parte, el partido se ponía de Ida y vuelta cuando el colegiado Sanchez Sánchez indicaba el camino de los vestuarios.
Una primera parte con pocas ocasiones que se animó según se acercaba el final.
Visto en el verde, un empate hubiera sido lo más Justo.
Con todo ello saltaban sin novedades en la formación ambos equipos.
La novedad fue sin duda, que no se llevaba un minuto cuando se pudo ver la primera llegada con peligro, Unionistas como protagonista. Un gran centro por banda derecha casi llega a buen puerto, poco falto para que el defensa local no llegara a sacarla de la cabeza de Guille Andres.
En el rechace y a la contra Miguel respondió con un tiro que quiso sorprender a Molina que no se fue por mucho. Un minuto y poco, y casi se vio lo mismo que en los primeros cuarenta y cinco minutos, parecía otro partido.
Tres minutos después una falta al borde del área en la que Salisu recibió amonestación hizo aflorar los uyys en la grada. Por poco se marchó el disparo de Gallego por encima de la meta de Samu.
Poco a poco se fue asentando el partido, y se pudo comprobar que el Real Valladolid B cedió el balón a Unionistas, que fue el que llevó la mayor parte de posesion, eso si, las ocasiones pasaron a un segundo plano en el protagonismo.
No fue hasta el minuto 75 cuando se vio el siguiente disparo con un mínimo de intención, obra de Waldo para los locales que se marchó sin inquietar la meta Unionista.
Los locales a falta de un cuarto de hora cedieron aún más si cabe el balón a los salmantinos, buscando salidas a la contra.
Roberto Aguirre puso toda la carne en el asador dando entrada a Unai, Góngora por lesión de Garrido y a falta de cinco minutos a Piojo.
El balón parado eso si, fue el arma de los visitantes durante todo el encuentro. A falta de nueve minutos una falta botada al corazón del área fue rematada por Llano, que se marchó fuera por centímetros. Fue la más clara hasta el minuto 95, donde tras un minuto más de añadido a los cuatro que se habían dado, Molina, si Molina, el guardameta visitante hizo el empate de cabeza tras un rechace en una falta lateral.
La locura se adueñó de las grasas, unos no daban crédito y los otros como es de suponer no paraban de festejar el inusual tanto del protagonista del encuentro.
Con esto se dio finalizado el partido, ni se llegó a sacar del centro del campo.
Con este reparto de puntos ambos equipos se mantienen a una distancia prudencial de los puestos comprometidos pero no terminan de sellar una tranquilidad que en esta categoría, vista la igualdad es muy de agradecer.
