Victoria del Mirandés sobre el Atlético Baleares en los primeros noventa minutos de la eliminatoria. Una eliminatoria que como ocurrió hace siete años, el Mirandés se pone por delante en la ida. La pone a su favor el cuadro rojillo, que ha golpeado primero y lo ha hecho con fuerza gracias a los goles de Matheus y de Álvaro Rey. Una renta que hace justicia a lo visto en el campo mirandesista, donde el cuadro balear mostró una gris imagen y, salvo en momentos puntuales, fue netamente inferior al cuadro rojillo.
Salió mucho más enchufado el Atlético Baleares que al minuto uno tuvo la primera ocasión en un remate de Nuha Marong, pero fue anulada por fuera de juego. La que si fue válida fue, al 3′, la de Fullana. El capitán se interna en el área y conecta un disparo que tras tocar en Sergio González se va al travesaño. Al Mirandés le tocaba sufrir ante el empuje baleárico, pero supo hacerlo y poco a poco llevando el partido a su terreno.
Superado el primer cuarto de hora, especialmente por las bandas y dominando con claridad la posesión, el cuadro de Borja Jiménez fue haciéndose dueño y señor del partido. No lograban crear claras ocasiones, pero al 24′ avisó el héroe de Huelva. Paris Adot entrando desde atrás recibió un pase de Álvaro Rey. El navarro quiso poner el balón al segundo palo, pero Peris metió la pierna para desviar a córner. Fue un primer aviso, porque a la media hora Paris Adot sí lograría su objetivo. Nueva internada del lateral que pone el centro raso al segundo palo donde Matheus, libre de marca, solo tiene que empujar a la red.
Paris y Álvaro Rey marcan la diferencia
Intentó la reacción de forma inmediata la escuadra de Mánix Mandiola. Canario dos minutos después del tanto tuvo el 1-1 con un disparo que se fue fuera. Pero los baleáricos intentaban subir su intensidad, ante un Mirandés que tocaba y tocaba con infinita paciencia buscando los huecos. Al 38′ fue de nuevo Paris el que lo encontró y en una jugada calcada al 1-0 buscó el mismo pase a Rodrigo Sanz, pero ahora Carl Klaus salió para atajar.
Parecía que el primer tiempo finalizaría con el 1-0, pero el Mirandés iba a hacer más daño. Álvaro Rey, con un disparo desde el vértice del área izquierdo puso el balón en la escuadra lejos del alcance de Carl Klaus. Anduva estallaba, pues con dos zarpazos, pero qué zarpazos, se veía con dos goles de ventaja, haciendo lo que nadie le había hecho en este play-off al cuadro baleárico: hacerle dos goles en un partido.
La segunda parte comenzó con el Mirandés de nuevo dominador del choque. Guridi y Matheus dispusieron de dos opciones para el 3-0 pero erraron en el remate. Viendo desde la banda que su equipo seguía sin reaccionar, movió su banquillo. Y logró una reacción. La entrada de Marcos de la Espada y Hugo Díaz le dio un poco más de presencia ofensiva, pero sin lograr inquietar con claridad a Limones.
Los de Mánix apretaron al final
Al 68′ Paris fue derribado por Villapalos claramente dentro del área, pero el colegiado no apreció la infracción. Una pena máxima que además de una clara opción para un 3-0, hubiese podido suponer la segunda tarjeta del central baleárico. Un cuadro, el visitante, que tenía más presencia ofensiva, pero solo creaba un mínimo peligro con disparos lejanos. La zaga rojilla se defendía con orden y disciplina, abortando las escaramuzas baleares. Marcos de la Espada lo probo de vaselina al 74′, pero muy alto.
Pero el Mirandés no renunciaba al ataque. Espoleados por su público seguían buscando, sin asumir riesgos el tercero. Guridi lo tuvo, pero no pudo aprovechar un grave error de Villapalos al 77′. Esa ocasión ayudó al Mirandés a bajar las pulsaciones del partido y evitar el sufrimiento al que le estaba sometiendo el cuadro de Mandiola que lo intentó hasta el pitido final. Pero quien tuvo más cerca el tercero fue de nuevo el Mirandés. Al 90′ una galopada de Cerrajería superó a Carl Klaus que salió de su área y su centro-chut lo sacó bajo palos Villapalos.
No obstante aún hubo tiempo para un último susto de la parroquia local. Adrián tuvo el 2-1 en su testa al 93′ tras un servicio desde la banda, pero el ariete canario no fue capaz de dirigir el remate entre los palos de Limones. No se movería el marcador y el cuadro rojillo mantendría ese valioso 2-0 para la vuelta en Son Malferit el próximo domingo 30 de Junio a las seis de la tarde.