Un Villarreal-Athletic se ha convertido ya en uno de los partidos más atractivos de la Primera División española. Uno de esos partidos en los que los dos equipos siempre se juegan algo más que tres puntos, pues siempre luchan por los mismos objetivos a final de temporada. Este año, ambos clubes persiguen a poca distancia los puestos europeos, y una victoria les acercaría aún más al difícil objetivo de la sexta plaza.
Tropezón en Eibar
El Villarreal está cosechando unos números asombrosos cuando juega en casa. De hecho, está a punto de superar la mejor racha goleadora del club cuando juega como local: de marcar frente al Athletic, serán 21 partidos consecutivos marcando en casa, superando una racha del 2001. El estado de forma goleador de los hombres de Calleja es envidiable. Son el segundo equipo más goleador de la liga, y de La Cerámica aún nadie se ha llevado los tres puntos.
Es todo un desafío para los de Garitano salir victoriosos del fortín groguet. De hecho, el Athletic solo ha ganado una vez en La Cerámica, y fue el año pasado en una de las peores temporadas del histórico ‘groguet’. Este año, el Villarreal ha convertido su fútbol en una mezcla imprevisible de recursos que siempre acaban con goles, tanto a favor como en contra.
Pueden jugar largo a la espalda, buscar desequilibrio en bandas, juntar piezas por el centro… el peligro ofensivo es abismal. Sin embargo, hay otra cara de la moneda no tan positiva. La fragilidad defensiva que sale a flote como visitante ha hecho perder algunos puntos al Villarreal, y dos fueron en Eibar con el partido ya finiquitado. Ante rivales intensos que acortan distancias y achican espacios -Osasuna, Eibar-, el Villarreal sufre. ¿Veremos a un Athletic así?
Muniain realza el vuelo
Tarde o temprano, los leones tenían que volver a ganar. La espera ha sido muy larga para ver cómo el Athletic sacaba los tres puntos, pues hacía más de un mes que los de Garitano no realizaban un buen partido. En el transcurso de las jornadas, el Athletic cosechó tres derrotas y dos empates. Pero llegó Muniain, el capitán rojiblanco para devolver la sonrisa a el Nuevo San Mamés.
Tras la exhibición del vasco, el Athletic está a solo un punto del Villarreal y a tres de la sexta plaza. El doblete de Muniain permitió cerrar una etapa negativa sin poder ganar, pero el Athletic lleva siete partidos consecutivos sin ganar fuera de casa. Es una cifra bastante pobre, pero el día más indicado para cerrarla sería el domingo. Ya no solo está en juego seguir acechando Europa, sino el poder competir y ganar contra rivales directos a Europa.
Garitano sabe de la importancia del partido, y habiendo visto cómo los equipos cercanos a su estilo han puesto contra las cuerdas al Villarreal, lo más probable es que acerquen su dibujo y estrategia a cerrar el campo, achicar espacios y salir rápido al contragolpe. Intensidad como rasgo definitorio del esquema.