El defensa del Mallorca Brian Oliván ha calificado la visita del Sporting de Gijón este domingo a Son Moix como una «gran oportunidad» para distanciarse en la tabla de un rival directo en la lucha por el ascenso: «Es una final», resumió el futbolista catalán.
«Para nosotros es un partido muy importante porque sería dejar a un rival directo a cierta distancia. Nos lo tomamos como una final. Creo que va a ser un partido muy difícil y vamos a tener que hacer las cosas muy bien», ha declarado Oliván en rueda de prensa telemática.
El Mallorca es segundo con 25 puntos, no pierde desde hace once jornadas consecutivas y su portería solo ha encajado dos goles.
«No podemos relajarnos, pero tenemos las ideas muy claras», ha señalado el lateral bermellón.
«Sabemos que tenemos que dar el máximo para ganar los partidos. Tanto el encuentro ante el Girona que ganamos (0-1) como el del Sporting son una prueba de fuego para saber el nivel del equipo», añadió.
Oliván ha sido una de las nuevas incorporaciones de esta temporada y ha tenido minutos con el técnico Luis García Plaza. «Estoy encantado tanto por vivir en la isla como con el equipo», ha explicado.
«Estoy en un lugar idóneo para triunfar. Sabía que era un proyecto muy ilusionante e importante para mí. Tenía ganas de hacer un buen año y de momento hemos empezado muy bien. Veo a los jugadores con mucha ambición y con mucha hambre. Eso es algo necesario para conseguir el objetivo a final de temporada», finalizó el ex jugador del Valladolid, Girona, Granada y Cádiz, entre otros equipos.