Munir mete al Sevilla en octavos de final
Un tanto de Munir en los minutos de descuento daría a los sevillistas su pase a octavos de final de forma heroica y a falta de dos jornadas por disputar aún
El conjunto sevillista viajaba a las tierras frías de Krasnodar, en Rusia, para buscar los tres puntos que les metieran en la siguiente fase de la Champions League. El lugar donde Lopetegui fue destituido como seleccionador sería la sede donde el Sevilla se enfrentaría a un equipo que ya se lo puso muy difícil en el Ramón Sánchez-Pizjuán y, que esta vez, lo tendrían que hacer sin Jesús Navas liderando al equipo.
El Sevilla sale a por los tres puntos
Los jugadores del técnico vasco sabían que no querían las mismas sorpresas que en su estadio y saldrían con todo desde un principio. En aquel entonces las ocasiones llegaban pero el tanto no, y eso lo solucionó Rakitic en la primera ocasión de los suyos. Ocampos buscaría a De Jong con un centro que sería rechazado por la zaga rusa, pero en la frontal se encontraba el ’10’ croata para engancharla de primeras y sorprender a Gorodov, poniendo el primer tanto en el marcador.
El tanto serviría para meter aún más al Sevilla en el partido. El conjunto andaluz tenía la tranquilidad de tener el partido donde quería y meter la presión a su rival para que se abriese en busca de su tanto. Los pupilos de Musayev parecían tener mucha prisa por llegar a la portería de Vaclik y eso era justo lo que quería Lopetegui para encontrar todavía más hueco, tras los robos conseguidos por la presión alta que hacía su equipo.
Aunque por momentos parecía el Krasnodar podía dar algún susto, el control era de los hispalenses. La polémica llegaría al borde de la media hora cuando una mano clara a simple vista no sería pitada ni por el colegiado en directo ni por el VAR. Esta acción podía haber supuesto el 0-2 y habría que ver si más adelante no echarías en falta esa pena máxima.
Wanderson mete miedo al Sevilla
El conjunto ruso necesitaría pasar por el túnel de vestuarios para reajustar su juego y empezar a darle sustos al Sevilla. Desde que sonara el pitido que reanudaba el partido, el Krasnodar se lanzaría a por todas. Cuando se temía lo peor, tras un error garrafal de Gudelj, Kounde aparecería milagrosamente para sacar el gol casi en la línea y mandarla fuera cuando todo el estadio gritaba ya el tanto local.
La salida de Wanderson había revolucionado a todo el equipo ruso y, finalmente, el aviso del extremo llegaría como gol. Una nueva contra del Krasnodar acabaría con el extremo brasileño con varios jugadores sevillistas por delante pero eso no le impediría romperla superando a Vaclik. En la línea de gol volvería a estar Kounde, pero esta vez no conseguiría desviarla, pese a tocarla, y vería como el balón entraba en su portería poniendo el empate a uno.
Entre el tanto local y el desajuste en el lateral izquierdo, a raíz de una lesión de Escudero, el Sevilla veía en muy pocos minutos como su partidos había pasado de una victoria, más o menos cómoda, a un partido complicado. El conjunto de Musayev se había echado arriba y le estaba comiendo el terreno a unos hispalenses que parecían tener miedo por primera vez.
Munir desata la locura
Los últimos minutos se antojaban con mucha tensión. El partido estaba abierto por completo y ambos equipos veían como el esférico pasaba de un equipo a otro, que buscaban a la contra el tanto necesitado. Las ocasiones más claras llegaban aún así por parte sevillista, tal y como reflejaría Idrissi con un tiro que le sacaría Gorodov con un gran despeje con su hombro derecho, y esta era la tónica que quería Lopetegui hasta el final para evitar sustos y solo tener los suyos la posibilidad de ganar.
Pero aunque dicen que las prisas son malas consejeras, el Sevilla tiene algo con Europa especial y así lo demostraría en los minutos finales. Una nueva contra de los de Lopetegui acabaría en los pies de Munir. El extremo probaría pero daría en un defensa, por suerte el esférico caería de nuevo donde Munir y la volvería a romper cruzada para superar al guardameta ruso.
Pese a que en el último minuto de descuento llegaría un susto más para los sevillistas, el pitido final de Marco Guida daría el pase a octavos de final a un Sevilla que sigue soñando en Europa. Lo único que tendrá que luchar en las dos últimas jornadas será por la primera plaza frente a un Chelsea que también ganaba por 1-2 en su visita al Rennes.
