El Valladolid Promesas sale colíder de Miramar

Victoria del Real Valladolid Promesas en Miramar gracias a un gol a balón parado de Miguel Rubio. Una victoria, en el partido aplazado de la cuarta jornada, que coloca al filial blanquivioleta como colíder del grupo con el Langreo, éste, eso sí, con un partido menos. El partido fue feo, tosco y con pocas ocasiones; disputado sobre un césped de Miramar que con las lluvias no estaba en buen estado y donde el balón parado fue decisivo una vez más.

El partido comenzó con el césped en buen estado, pero blando debido a la lluvia que estaba cayendo sobre Luanco. El cuadro local salió mejor al partido y tenía más posesión sobre un césped que poco a poco se fue volviendo más pesado y difícil de jugar sobre él. Los primeros acercamientos fueron un disparo de Míchel y un remate muy alto de Trabanco. El Promesas intentaba, ante el mayor dominio local, buscar transiciones hacia Sergio Benito, pero las vigilancias defensivas al delantero era muy severas y no le dejaban maniobrar.

Con el paso de los minutos empezaron a llegar más ocasiones y algo más claras. Dos remates de Mendi y Trabanco en acciones a balón parado se fueron arriba por poco, pero también el equipo de Javier Baraja logró inquietar la portería de Chechu Grana, que de hecho a pesar del dominio local, fue el único portero que tuvo que intervenir con un disparo de Paulo Vitor. Sin embargo la más clara y última de la primera parte, fue un libre directo de Kuki Zalazar que se fuera por poco.

El campo ya empezaba a dar síntomas de colapso y el balón no rodaba con fluidez, anticipando que en el segundo tiempo, dado que no cesaba de llover, la situación iría a peor. Pero en los minutos iniciales el Marino salió fuerte y tuvo su mejor ocasión con un disparo que Álex Arias que se fue al poste. Poco después lo intentó desde muy lejos Luis Morán pero no sorprendió a Gaizka. También Paulo Vítor, el jugador más activo y vertical del filial blanquivioleta lo intentó tras jugada personal, pero su disparo se fue al lateral de la red.

Sin embargo, a pesar de no tener tanto protagonismo, acabaría adelantándose el Promesas. Sería a balón parado cuando una falta lateral botada por Vilarrasa la remata a la red Miguel Rubio a pesar de que estaba siendo agarrado -en un claro penalti- por Miguel Prado. El gol fue un jarro de agua fría para el Marino que acusó el golpe y ya no rondaba el área blanquivioleta con el peligro que la rondó hasta el gol de Miguel Rubio. Además Trabanco, un hombre clave en las estrategias para el Marino, se lesionaba y no podía continuar.

El partido se consumía sin que el Marino lograse de nuevo hacerse con el control y apretar al filial castellano y poner en riesgo su victoria. No fue hasta el 76′ que un disparo desde la frontal de Luis Morán hizo intervenir, aunque sin hacerle pasar apuros, a Gaizka. Pero en el tramo final el que tuvo más cerca la sentencia fue el Promesas. Fran Álvarez, en su primera aparición en el partido, se movió en el área dejando atrás a un defensor y picó el balón sobre Chechu Grana, pero Guaya evitó el 0-2 bajo palos en el minuto 82.

No sería la última acción reseñable de un partido, ya que en el añadido una falta en la frontal lanzada por Luis Morán requirió de la intervención de Gaizka Campos para salvar el partido para los suyos. De esa forma, los puntos en juego se van dirección a Valladolid. Pero para ambos esto no para, pues el fin de semana tienen nuevos compromisos. El Marino recibirá al líder del grupo, el Unión Popular de Langreo, el domingo a las 17:00 horas en Miramar. Por su parte el Promesas visitará ya este mismo sábado a las 16:00 horas al CD Numancia en Los Pajaritos.