El Athletic, que no pudo disputar su último partido liguero, se enfrentó a un Real Madrid que venía de empatar en Pamplona. Los madridistas, como vigentes campeones del título querían revalidar el entorchado, mientras que el Athletic quería repetir el logro logrado frente al Barcelona en el verano de 2015 con el anterior formato.
Doble zarpazo de Raúl García
El conjunto dirigido por Zinedine Zidane salió bien plantado al césped de la Rosaleda. Con un punto más de concentración e intensidad, los blancos llegaban con relativa facilidad a las inmediaciones del área de Unai Simón gracias a las rápidas transiciones de balón. Sin embargo, un fallo en la salida de balón de Lucas Vázquez propició el primer tanto para los leones. Dani García aprovechó el error merengue para filtrar un balón medido a Raúl García y el delantero rojiblanco batió por bajo a Courtois.
El tanto dejó tocado al equipo madrileño, que lo intentaba. El Athletic de Marcelino, por su parte, sabía perfectamente cómo manejar cada situación del partido. La posesión era para el Real Madrid, pero el control del partido era vasco. En el minuto ’36 Íñigo Martínez le ganó la partida a Lucas Vázquez y el reconvertido lateral cometió penalti. Pena máxima que no desaprovechó Raúl García, que engañó a Courtois y con potencia y técnica la colocó a media altura en la portería del meta belga. La primera parte acabó con dos goles de ventaja en el electrónico para el equipo león y con un cambio de cara bastante notable de la mano del nuevo míster.
Benzema llegó tarde
La segunda parte comenzó con la entrada de Nacho por Varane, que pudo haberse hecho daño en un lance del juego. El Madrid, algo adormecido, intentaba recortar distancias. En el ’53 Muniaín pudo cerrar la semifinal, pero su cabezazo se marchó por muy poco. Asensio fue uno de los más activos en el ataque blanco. En el minuto 62 estrelló un balón en la madera de la portería defendida por Simón. Siete minutos más tarde, el jugador mallorquín volvió a encontrarse con los palos por segunda vez. El buen disparo de Asensio se marchó al larguero.
A falta de menos de veinte minutos para el final Benzema marcó el primer gol para los suyos. Tras la revisión del VAR por un posible fuera de juego del francés, el tanto subió al marcador. El Athletic no le perdió la cara al partido y no solo no se cerró atrás, subió filas y cerca estuvo Villalibre de conseguir el tercero para los suyos.
En el ’82 Benzema anotó el gol de la igualada, pero esta vez su posición si era de fuera de juego. Los últimos minutos fueron de infarto para los dos equipos. El Madrid salió a la desesperada con Ramos en la punta de ataque y casi le salió la jugada a Zidane. El VAR revisó un posible penalti de Vesga sobre Ramos, aunque el colegiado de sala no vio acción punible, por lo que el Athletic disputará su primera final con el formato nuevo y el Real Madrid no podrá revalidar título.