Puede que para muchos el resultado sea una sorpresa. Que para muchos el hecho de que el Rayo Vallecano gane al FC Barcelona sea tal. Pero lo cierto es que las trayectorias invitaban a que esto pudiese pasar… y pasó. Un gol de Falcao, un penalti detenido y varias paradas más de Dimitrievski y un Rayo valiente y nada conservador salvo en los minutos finalísimos condenen al cuadro blaugrana a una nueva derrota y deje a Ronald Koeman más al borde del abismo de su posible cese.
El Rayo salió muy enchufado y activo al partido, con una altísima presión a todo el campo que hizo que el FC Barcelona no lograse salir cómodo desde atrás. Eso le permitió robar o transitar rápido y encontrar situaciones de gol pero que no logró finalizar con acierto porque Falcao y Álvaro García no llegaron al remate en dos llegadas peligrosas. No fue hasta pasados 10 minutos, cuando Memphis logró asustar en la primera salida de balón limpia que los culés encontraron, con un disparo que no encontró portería.
A partir de ahí el conjunto blaugrana empezó a amasar más balón, pero el Rayo mantenía esa alta y fuerte presión. Falcao la tuvo al cuarto de hora con un giro sobre sí mismo muy rápido y disparo que pega en un defensa, evitando que el balón vaya en dirección a la portería de Ter Stegen. Pero, apesar de esa presión del Rayo, el dominador en esos instantes era un Barça que llegaba fácil a las inmediaciones del área y buscaba algún espacio para probar y superar a Dimitrievski. La tuvo Dest, con un disparo que se fue alto.
Sin embargo el Rayo persistió y obtuvo premio. Una pérdida de Busquets en campo propio habilitó un pase de Trejo a Falcao que, tras recortar a Piqué, definió con perfección al poste izquierdo de Ter Stegen para poner el 1-0. El Rayo encontró ese error que buscaba para adelantarse, pero tras el gol mantuvo el plan y mantuvo esa fuerte presión que estuvo, al 34′ cerca de darle el 2-0; mas el robo de Isi en la frontal acabó en un disparo muy alto.
Tampoco cambió su plan el Barça a pesar de verse abajo en el marcador. Insistió y encontró ocasiones principalmente por el buen hacer de Memphis. Pero Dest se encargó en el área pequeña de fallar la primera y no ser capaz de rematar la segunda mientras la primera parte caía en intensidad y se consumía sin más ocasiones, pero con el 1-0 al descanso ondeando de forma clara en Vallecas.
Tras ese intermedio, el Barça salió decidido a por el empate. El Rayo mantenía su presión, pero se guardaba algo más para que los blaugrana no pudiesen correr si sacaban el balón. Porque el mayor peligro culé llegaba cuando eso sucedía. Así tuvieron ocasiones Nico y especialmente Agüero que dispuso de dos, la primera arriba y la segunda despejada por Dimitrievski con el pie. Pero el Rayo no esperaba solo atrás guardando su preciada renta sino que quería aumentarla. Un mal control privó a Álvaro García, solo en el área, de poder encarar y fusilar a Ter Stegen en una clarísima opción.
El Barça mostraba más pundonor que juego en busca del empate y la fortuna le iba a sonreír dándole una ocasión inmejorable. Óscar Valentín comete un tan involuntario como claro penalti sobre Memphis que Mateu Lahoz no dudó en señalar. El neerlandés ejecutó la pena máxima, pero Dimitrievski lo atajó en dos tiempos, no dando opción a que hubiese rechace ni segunda acción y manteniendo en ventaja al equipo de la franja.
El partido estuvo parado varios minutos para atender a Dimitrievski y tras el mismo el Barça reanudó el asedio. En el 82′ llegó la jugada controvertida, con un fuera de juego decretado por el línea que Mateu Lahoz dejó seguir y Agüero, solo, no pudo marcar ante el portero macedonio. El Barça se volcaba y dejaba unos espacios que el Rayo aprovechaba para llegar, pero fallando en la finalización para cerrar el encuentro; dejándolo vivo. Pero aunque el Barça tenía tiempo para al menos empatar, no generaba ocasiones. El Rayo fue un muro y siguió saliendo con peligro cuando encontraba los espacios, pero el marcador no se movería y casi 20 años después se confirmó que el Rayo volvió a ganar al Barça.
Al final, tras un largo descuento de nueve minutos, el Rayo lograba una nueva victoria que deja a Ronald Koeman muy tocado y al Barça en mitad de la tabla mientras que el Rayo mira a Europa. El fin de semana ambos tendrán compromiso de la duodécima jornada. El Barça jugará en apenas tres días, el sábado a las 21:00 horas cuando recibirá al Deportivo Alavés. Por su parte el Rayo no lo hará hasta el lunes 1 de noviembre. Ese día a las 18:30 horas recibirá de nuevo en Vallecas al Celta de Vigo.