El derbi extremeño por excelencia se juega en el Nuevo Vivero

Dice un poeta, filósofo y cantante extremeño sobre Extremadura que es: “tierra de conquistadores, no nos quedan más cojones…” Los extremeños, como los gallegos, que siempre estuvimos en la diáspora, hemos estado olvidados durante años, esperando esa mentira de la “deuda histórica”. Y el fútbol extremeño no iba a ser menos y también ha estado abandonado a su suerte. Sin ningún equipo en el fútbol profesional, con equipos que desaparecen y tiene que volver a reinventarse desde los campos de barro, hasta el momento actual que no parece nada prometedor, como el futuro de Extremadura. Los equipos de Badajoz y Almendralejo están en un momento institucional muy delicado. Los segundos más aún que los primeros. Y es que la deuda no será histórica, pero empieza a ser preocupante.

El CD Badajoz, discurría esta semana entre rumores, que no noticias, de un posible desbloqueo por parte de la audiencia de Málaga, para una posible venta de las acciones del club. Se especulaba incluso con la empresa y el nombre concreto del posible comprador. Habrá que esperar la decisión de la jueza, ya que como todos sabemos la opinión de fiscalía no es vinculante. Lo que está claro es que sería un soplo de aire fresco para un club que lleva haciendo las cosas muy bien durante bastante tiempo.

En lo deportivo el equipo blanquinegro afronta el derbi extremeño con buenas sensaciones en el equipo, en cuanto a juego y compromiso del vestuario, pero tiene una asignatura pendiente. Y es que el dominio y las ocasiones que tienen los pacenses no se transforman en gol. Está claro que todos los delanteros tienen rachas y eso tiene mucho que ver con la confianza. Por lo que su entrenador seguro que estará trabajando este aspecto con sus delanteros. Delanteros como Benito, que está jugando a un buen nivel, con desmarques constantes, rompiendo las líneas, con continuos remates, seguro que antes o después romperán la lata. Seguro que marcando un gol en el Nuevo Vivero, con 8000 personas gritando ese gol, se quitará esa presión y vendrán muchos más goles detrás. No me cabe la menor duda.

Esta misma semana su entrenador, Óscar Cano, argumentaba que la plantilla se le queda un poco corta para ocupar algunas posiciones o para hacer cambios durante el partido. Y es que las lesiones están lastrando a la plantilla que entrena el granadino. También hablaba de que no cree que su equipo esté mal físicamente, pues los datos (Big data) así lo confirman. Los datos pueden marcar los km que hace un jugador y en las  segundas partes claro que siguen corriendo, pero casi siempre detrás del balón, con el sometimiento del rival, que en ese período va a una velocidad más. Sólo hay que ver sus partidos, para ver que en esa segunda mitad, al equipo le falta frescura  y velocidad para un desmarque, para un regate, para desplegarse y replegarse… En fin esperemos que este apartado también lo mejore el club. Y como en casi todos los apartados  de la vida deberían mirar hacia dentro y no hacia fuera.

El Extremadura UD, por su parte, ha tenido una de las semanas más intensas en lo que va de temporada. El pasado martes se reunían los capitanes del conjunto almendralejense con miembros de AFE y decidían convocar una huelga, que duraría del 5 al 21 de noviembre. La situación del club es crítica. Los jugadores suspenderían toda actividad en ese período: entrenamientos y partidos. Lo que abarcaría un total de 3 partidos. Y de no jugar 2 de ellos, quedarían eliminados de la competición. En lado positivo, si todo esto tiene algo positivo, que el miércoles pasado en el juzgado de lo mercantil de Badajoz, se llegó a un acuerdo entre los acreedores y el club, para el aplazamiento en el pago de la deuda. Esto hace que el equipo de la capital de Tierra de Barros respire un poco. Aunque el principal problema, que es el pago de las nóminas a sus trabajadores, no está resuelto en absoluto. Ojalá en los próximos días se solucione. La maravillosa ciudad de Almendralejo y su histórico club así lo merecen.

Al derbi del domingo llegan además con bajas importantes en lo deportivo. A la baja en la zaga de Morcillo, por doble amonestación la semana pasada ante el CD Tudelano, hay que añadir la de su capitán, Kike Márquez, por acumulación de tarjetas. Y esta sí que es una baja sensible para el conjunto azulgrana. Su capitán es un jugador diferencial. Qué desequilibra en cada jugada y cualquier posición del campo, además de ser un jugador con mucho gol. Por lo que los pupilos del coruñés Manuel Mosquera, tendrán que multiplicarse, especialmente en ataque, si quieren hacer daño al Badajoz. El equipo de los “valientes” no tiene mucho gol de momento en el campeonato, pero también cuesta hacerle ocasiones y goles. En cualquier caso, el próximo sábado es un derbi y ya sabe que ahí se igualan siempre las fuerzas. Y este vestuario, que está solventando con entereza un año durísimo en lo institucional y lo personal, seguro que lo dará todo en el verde del Nuevo Vivero.

En cualquier caso, mañana a las 19:00h, en el estadio Nuevo Vivero se verán las caras los dos mejores equipos de Extremadura. Con un hermanamiento entre las federaciones de peñas de ambos conjuntos. Con muchos problemas institucionales, pero con un respaldo bestial de sus aficionados. Y es que podrán hundir una y otra vez a los clubes de esta región de tierra de conquistadores, como diría el genial Robe Iniesta, pero volverán a levantarse una y otra vez. Se acabó el “no nos quedan más cojones”. Más bien los extremeños y las extremeñas están en un punto de; “NO NOS TOQUEN LOS … Pues eso.