El Almería vuelve a sonreír

Seis partidos después de aquel 11 de diciembre frente al Real Zaragoza, la UD Almería vuelve a ganar un partido. No lo hizo de forma brillante, con un juego que fue más de empuje e intensidad que de calidad, pero en el que hizo ocasiones y méritos para llevárselo. Porque la UD Ibiza planteó un partido en el que los de Paco Jémez se quedaron a medias. Intentaron ser valientes, con una presión muy alta y saliendo a disputarle el balón a los locales, pero que luego en ataque les faltaron ideas. No lograron crear apenas ocasiones y sufren la primera derrota desde la llegada del técnico canario a su banquillo.

El partido comenzó muy marcado por el respeto entre ambos conjuntos. Aunque a los cuatro minutos Ramazani tuvo el 1-0 en un remate con la izquierda tras un centro de Portillo, las ocasiones no llegaban en este primer tramo de partido. Los indálicos tenían más balón que los ibicencos, pero sin generar peligro ante la meta de Álex Domínguez.

Pero superados esos anodinos primeros veinticinco minutos, los de Rubi dieron un claro paso adelante. El balón circulaba más rápido y el Ibiza empezaba a sufrir más en defensa, ya que los de Jémez nunca renunciaban a una presión muy alta para poder robar. Algo que los almerienses copiaron con más éxito, robando en campo contrario o pudiendo correr con espacio. Samú Costa, tras una gran transición, tuvo el 1-0 al minuto 32, pero Álex Domínguez tapó muy bien su disparo.

Ese alto ritmo local siguió hasta el descanso, pero sin lograr inquietar al portero del cuadro pitiuso. Ramazani lo intentó con una acción individual, pero su eslalom entre la defensa no pudo superar a todos los hombres. Al descanso, que se llegó tras no añadir nada el colegiado a pesar de los numerosos parones e incluso pérdidas de tiempo, hubo una bronca contra Moreno Aragón que acabó con expulsión de Rubi por ver dos amarillas consecutivas en el intermedio.

El partido tenía unas revoluciones altísimas y no cambiaron tras el descanso. Arnau vio amarilla a los diez segundos, pero antes de los dos minutos, Álex Domínguez ante Sadiq y Gálvez ante Pozo evitaron el 1-0 en un partido muy bonito, vertical y de ida y vuelta. De nuevo el portero ibicenco volvió a evitar el gol de Ramazani, pero lo que dio, él lo quitó. A los diez minutos, Álex Domínguez no sujeta un disparo lejano de Akieme, queda el balón suelto y al rechace derriba a Sadiq al llegar tarde. Ramazani, con suspense, logra transformarlo para poner el 1-0 y dar justo premio a su equipo en este buen arranque.

Con ese gol, el partido bajó varias marchas de intensidad. Los almerienses seguían buscando el segundo gol, pero sin exponerse tanto. Le tocaba al Ibiza dar un paso adelante, pero le costaba a pesar de los cambios ofensivos introducidos por Jémez. Solo un cabezazo desviado de Castel se contabilizó como ocasión. Pero en un error en una cesión atrás se le pondría el partido al Almería para cerrarlo. Y es que llegaría el segundo penalti sobre Sadiq, ahora de Gálvez, que además dejaba a su equipo con diez al ver la segunda amarilla. Ramazani, de nuevo, lanzaba, pero ahora Álex Domínguez despeja evitando el gol.

Su portero mantenía con vida en el partido a los ibicencos que, aunque en inferioridad, seguían solo un gol abajo, pero eran incapaces de generar ocasiones. Solo en acciones a balón parado se veía al Almería sufrir, pero sin tener que encomendarse a un Fernando que les salvase. Esto además en un contexto donde los indálicos pudieron sentenciar con un segundo gol en varias ocasiones, llegando finalmente en el último minuto de partido con el Ibiza volcado en busca del empate, ya que igual daba caer por uno o por dos goles.

Ambos tendrán ahora una semana larga, de ocho días, hasta su próximo encuentro, ya que los dos no jugarán hasta el sábado 12 de febrero. Los ibicencos lo harán recibiendo en Can Misses al FC Cartagena a las 18:15 horas y la UD Almería visitando La Rosaleda a las 20:30 horas de ese mismo día.