Parecía que la lucha por la permanencia para el Leganés ‘B’ no iba a suponer una preocupación muy elevada, pero los resultados de las últimas jornadas dicen que aún tendrá mucho que pelear. Tanto por sus resultados como los de terceros equipos, ahora se ven inmersos de lleno en la lucha por evitar una zona roja a la que solo aventajan en dos puntos, pero con muchos equipos inmersos en esa pelea. Tantos que una victoria son tres puntos, pero un oxígeno clasificatorio que puede equivaler a seis.
Esa es la distancia con el descenso que marca precisamente el rival del joven conjunto blanquiazul este sábado. Llega a Butarque la UD Llanera en uno, sino el mejor, momento de la temporada. Dos victorias frente a dos ‘gallitos’ como Pontevedra y Compostela les hicieron asomar la cabeza. Pudo ser una tercera la semana pasada, pero tras ponerse 2-0 frente al Móstoles se complicaron cediendo un empate que les supo, en palabras de José Luis Rodríguez, a derrota.
El colegiado encargado de dirigir el encuentro será el canario de 22 años, Alejandro Tomé Alonso. Debutante en la categoría tras ascender desde Tercera RFEF el pasado verano, dirigirá su undécimo partido este curso y por primera vez a ambos conjuntos. En los diez anteriores, su balance es de cinco victorias locales, dos empates y tres victorias visitantes.
El Llanera volverá a defensa de cinco
El filial pepinero no pudo traerse un buen resultado de Luanco. Allí, Carlos Martínez quiso cortar su racha de derrotas, tres consecutivas suma, con un cambio táctico. Probó con una defensa de cinco que rindió bien. Los pepineros fueron superiores al Marino, pero les faltó el acierto que sí mostró su rival. Con 1-0 en el marcador todo se fue desmoronando y los cambios no solo no surgieron ningún efecto, sino que encima se pierde para este trascendental partido a Alba por sanción. Eso obligará al entrenador a volver a modificar su zaga para frenar su mala racha actual.
Por su parte el cuadro llanerense quiere extender su racha volviendo a sumar a domicilio. Con las bajas por sanción de Amadou y Marcos Arango. Ésto deja al técnico asturiano con pocos recambios para su zaga y con solo dos opciones para completar una zaga que se presume volverá a ser de tres centrales. Espinar y Paul Otía son fijos, por lo que la duda recae en si jugará Delgado o Pape Assane retrasa su posición. El resto del once es bastante probable que no se cambie, sobre todo con un Romaric en idilio con el gol y con unos Matías y Javi Sánchez en su mejor momento de la temporada.