Un gol in extremis que vale oro

Había que ganar, y se ganó. Y lo hizo el equipo de Luis Miguel Ramis para colocarse cuarto con una remontada in extremis dejando al Sanse con la miel en los labios de sumar un punto que recortarse distancias en su camino a la salvación.

El partido comenzó con los locales dominando la posesión y con un Tenerife que achicaba como podía el empuje donostiarra. En los primeros minutos Gabilondo generó problemas en sus subidas por la derecha y los centrales insulares despejaban como podía, pero el Tenerife defendía demasiado cerca de Soriano. Tardaría en asentarse en cuadro insular que, cuando lo hizo, vio puerta. Un saque de banda terminó cayendo a los pies de Enric Gallego escorado a la derecha. Este puso un centro con la zurda que peinó hacia atrás Mario, superando a Ayesa en la primera llegada blanquiazul (0-1, 9’).

El tanto ‘noqueó’ a los vascos, aunque siguieron dominando. . Como casi siempre, los de Alonso han llegado bien hasta el área defendida por Soriano, pero ahí les ha faltado algo más.

En el segundo tiempo los txuri urdin han buscado el empate y han dominado el partido en todo momento. Karrikaburu, en un complicado remate con la zurda, ha enviado el balón fuera en una de las ocasiones más claras. A falta de diez minutos para el final, en una preciosa acción colectiva, Navarro ha establecido un más que merecido empate que hacía más justicia en el luminoso. Robert Navarro fusiló libre de marca a Soriano (1-1, 80’).

Pero cuando más a favor estaba el encuentro, en una acción aislada, los isleños han vuelto a marcar a cinco minutos del final para llevarse el partido. . Centró Mollejo con su guante al corazón del área pequeña donde se elevó Elady para cabecear de manual al fondo de las mallas (1-2, 85’) y volver a poner a los canarios por delante. Ya no se  movería el marcador.

Sufrida victoria del Tenerife remontando in extremis para ponerse cuarto y dejan al Sanse sin poder recortar distancias con el Málaga