El Liverpool despertó del sueño al Villarreal tras ganar por 2-3 en el Estadio de la Cerámica, con remontada incluida, y estará en la final de París. Los hombres de Unai Emery hicieron soñar a su afición con una magnífica primera parte en la que lograron igualar la eliminatoria. Se marcharon al descanso con la eliminatoria empatada, pero en la segunda los reds se pusieron el mono de trabajo y acabaron con la resistencia del Submarino Amarillo, que vuelve a caer en unas semifinales de Champions.
No era fácil asaltar a este Liverpool. Es una máquina perfectamente engrasada que solamente ha encajado tres derrotas en 56 partidos oficiales de esta temporada en los que ha marcado 136 goles, que muestra un repertorio insultante de opciones para aumentar esa leyenda de equipo casi invencible. Emery logró desactivarlo con un planteamiento valiente y unos jugadores entregados a una idea. Pero el Liverpool reaccionó cuando parecía enterrado.
El guion fue el soñado para los castellonenses, que debían levantar el 2-0 de Anfield y al descanso ya tenían el botín de la prórroga. A los tres minutos, el Madrigal soñaba a lo grande con un gol de Boulaye Dia y antes del descanso Coquelin provocaba el éxtasis. Todo era posible para alcanzar la gloria, la estrategia diseñada había conseguido intimidar a los ingleses.
La solidez defensiva de los de Emery comenzaba a desquiciar al conjunto británico. Klopp sacó a la artillería pesada al descanso para darle la vuelta al partido y a la eliminatoria. La entrada de Luis Díaz dio otro aire al Liverpool aunque durante los primeros minutos el Villarreal pudo contener los intentos de los reds por acercarse a la meta de Rulli.
Desgraciadamente la resistencia le duró poco. Alexander-Arnold lanzaba el primer aviso con un disparo lejano que se estrellaba en el larguero tras rebotar en la pierna de Coquelin. A partir de ahí comenzó la mejoría del seis veces campeón de Europa y Fabinho la confirmaba. El internacional brasileño abría la lata con un gol que metía al Liverpool en la final de París.
El 2-1 golpeó el ánimo del Villarreal. Y también empezó a hacerse notar el cansancio en las piernas tras una primera parte a toque de corneta. Cinco minutos después, Alexander-Arnold puso un centro con la izquierda al segundo palo que Luis Díaz convirtió en gol. Conforme el partido bajaba de revoluciones, el Liverpool se iba sintiendo más cómodo, más aún con los dos goles de ventaja en la eliminatoria global. Lo cierto es que el Villarreal volvía a meterse en la eliminatoria si marcaba y gol. Pero fue Mané el que volvió a golpear. Un despeje corto de cabeza de Pau en el centro del campo, permitió al delantero senegalés encarar a Rulli y salvar la tarascada de Foyth. A puerta vacía remató suave con la izquierda para sentenciar la eliminatoria.
El susto pasó para un Liverpool que disputará su décima final de la ‘Champions’ (ante Real Madrid o City) y la tercera de la mano de Jürgen Klopp (derrota en 2018 ante los blancos y victoria en 2019 ante el Tottenham), mientras que el Villarreal se despide orgulloso tras caer en ‘semis’ por segunda vez en su historia.
