Partido de puro trámite para un Deportivo que tiene ya asegurada la segunda plaza de la clasificación liguera. De modo que estarán pendientes de lo que pueda ocurrir en el desenlace del torneo liguero en el otro grupo para conocer su rival en la semifinal del play off por el ascenso a LaLiga Smartbank. Por su parte, Unionistas intentará apurar sus opciones de colarse en el play off de ascenso. Para ello es imprescindible arañar los 3 puntos en su visita a Riazor y que se den los resultados favorables.
Ningún riesgo
Borja Jiménez no quiere correr ningún tipo de riesgo con los jugadores apercibidos. De este modo, jugarán este encuentro aquellos con menos minutos durante la liga para que lleguen con buenas sensaciones al play off. Así pues, es posible que tanto Miku como Quiles no salten al terreno de juego a pesar de estar presentes en la convocatoria. Tampoco jugará Antoñito, siendo el único lateral derecho que se encuentra sano de la plantilla. En su lugar jugará un Carlos Doncel como carrilero, así como William de Camargo o Héctor Hernández, sancionados. La gran novedad en la convocatoria herculina es la presencia del joven fabrilista Brais Val, que entra en sustitución de un Rafa de Vicente lesionado.
Unionistas, arropado
No estará solo Unionistas en su visita a tierras gallegas. Alrededor de 700 aficionados se desplazarán para seguir a su equipo en Riazor. Se prevee un gran ambiente en las horas previas al encuentro en la ciudad. De este modo, los charros podrán celebrar un posible puesto en el play off junto a su afición.
Las cuentas
Para que los salmantinos puedan disputar el play off deben ganar sí o sí su encuentro, pero no dependen de sí mismos, por lo que deberán esperar que se den unos resultados favorables. Y, además, que se materialicen dos de tres condicionantes. Una derrota o empate del Rayo Majadahonda en su visita al CD Badajoz, que no sume de tres la UD Logroñés en el Reino de León ante la Cultural Leonesa o que el Celta B sea derrotado en Las Gaunas ante la SD Logroñés. Si se dan estos condicionantes, los charros podrán soñar con el ascenso al fútbol profesional por primera vez en su historia.